jueves, 30 de diciembre de 2010

La última y nos vamos...

Así es mis queridos, amadísimos menos cinco lectores de siempre...
Con el corazón en la mano y la canción "Ven a cantar" de las estrellas juveniles de 1985 como fondo musical, éste su blog de confianza, les avisa que ya se le cansó el caballo y que es hora de ir cerrando cuentas.
Ustedes no están para saberlo pero éste año ha sido para mi uno de los más significativos en toda mi gatosa vida; así que como a nadie le gusta el chisme pero le entretiene, pasemos al recuento, a la numeralia, al anecdotário de hechos curiosos que acontecieron a lo largo de ésta larga jornada.
  • Número familiares que se dieron de baja en mi lista de "considerados": 3 y contando.
  • Número de veces que dije "en la vida vuelvo a hacer tal cosa": 365
  • Número de perros que atropellé en el año: 1 (maldíiito seas, Fluffy)
  • Número de veces que dije "ahora si, a hacer dieta": Ja!
  • Número de ex novios que se casaron: TRES!
  • Número de bodas de ex novios a las que fui requerida como madrina de lazo: 0
  • Número de bodas de ex novios a las que siquiera fui invitada: 0 (pos como!)
  • Número de clases de manejo de tortons que tomé para aventarme a manejar en carretera: 10!
  • NÚMERO DE VECES QUE DIJE "DE ESTA AGUA NO VOLVERÉ A BEBER": 1
  • Y número de veces que me tuve que tragar mis palabras: 1
  • Número de veces que he bebido de "esa" agua: pffff
  • Número de mascotas adoptadas: 1 gato
Así es queridos.
Este año dejé mi contaminado DF para ir a llevar glamour a otras civilizaciones menos afortunadas; me aventé a manejar en carretera, Mateo entró a la guardería, dejó los pañales, dejó el biberón; tuve el reencuentro más feliz de mi vida, tomé las riendas de mis negocios, retomé el gusto por escribir, cumplí treinta años y, lo más importante: aprendí a quereme más a mi misma...a pesar de mi misma.
De todos ustedes me llevo el grato sabor de saber que La Gatería les ha pintado una sonrisa en sus labios, que es el momento para echarse el cigarrín y reir con la desgracia ajena.
Espero que el prótsimo año, la máxima deidad existente nos socorra con Salud y mucha imaginación para salir adelante.
Un gran abrazo, nos leemos el próximo año.
(o sea, pasado mañana...no hay por qué ser fatalistas)
Un besote gatoso!

sábado, 25 de diciembre de 2010

La Navidá.

Mi época favorita desde siempre ha sido la navideña. Desde niña, a pesar de irregularidades en mi crecimiento y mi desarrollo (que tenían que ver con problemas existenciales con mi amigo imaginario y el uso obligatorio de zapatos ortopédicos) las fechas para cantar dale, dale, dale y salir en la pastorela, estaban marcadas con rojo desde enero. Mi mamá se sorprende que, siendo Grinch para muchos aspectos de la vida, tenga ese ánimo festivo para celebrar una fecha que ps la neta está bien devaluada. Y bueno, al paso de los años he tenido que reestructurar el verdadero significado de la navidad, dejando a un lado mi consumismo natural e inherente en todo ser humano (¡ustedes también, no se hagan!) para dar paso a lo que se espera que todos sintamos en ésta fecha: amor desinteresado y vehemente por la humanidad. Traducido al cristiano, que todos nosotros confiémos en todos nosotros.
Es difícil. Más que difícil es imposible.
Tal vez si viviésemos en una aldea noruega de 300 habitantes, donde neva y se come lutefisk, ese sentimiento sería latente, pues el cálculo nos indica que es matemáticamente posible confiar en una población donde comer sosa indiréctamente, es señal de que todo está bien entre nosostros.
Pero confiar en los 108.4 millones de compatriotas... no se. Yo puedo decir que confío en algunos de mis 77 amigos de facebook, que confío en uno que otro familiar lejano y que confío en mi familia cercana.
Eso sí, no confío para nada en el gato que tenemos por gerente general de éste país.
Ni en la Iglesia, a la cual en Diciembre, registra su "temporada alta".
Tampoco puedo amar salvaje y desinteresadamente a aquellos que año con año se frotan sus pezuñas esperando a que yo declare mis impuestos.
Ni al cabrón que me asalta en la esquina, quitándome mis cositas que con mucho trabajo adquiero (amén del susto que me pega)
Tons, volviendo al punto que es el significado de la Navidad y releyendo lo que acabo de escribir, yo diría que lo único que me motivó a celebrar éstas fechas de manera tan regocijante, fue la responsanbilidad y la ilusión de educar a un futuro ciudadano ejemplar.
Aunque no le haya latido el Mega tráiler que Santa y el Niño Dios (en un claro ejemplo de cooperación internacional) le obsequiaron y prefiriera jugar con la caja.
Ahora se de dónde salió la publicidad de Master Card.
Y finalmente, todo se reduce siempre a nada.
Feliz Navidad!

jueves, 23 de diciembre de 2010

Diciembre me gustó pa que llegaras.

Dicen que las cosas “buenas” te suceden/llegan/pasan cuando menos lo esperas.
Dicen también que las desgracias nunca llegan solas.
Entonces, analizando ésta filosofía de abuela, el hecho de que casi muriera por aburrimiento gripal tuvo su recompensa ésta día (o, tal vez sea lo contrario)

Cuando cumplí 16 años mis papás tuvieron a bien llevarme a vivir lejos de lo que yo denominaba “Circuito de la buena vida”. El depa que ocupábamos en Insurgentes Centro pasó a manos de usureros españoles, quienes no siendo los dueños nos lanzaron injustamente a la calle…bueno, no fue tan dramático: ni nos lanzaron, ni fuimos a dar a la calle, ni eran tan no dueños.
El caso es que, con nuestros enseres fuimos a poblar una parte de la ciudad que ni siquiera había escuchado mentar (ok, ok…no; no era tampoco tan así)
La hermana república de Tláhuac quiso que nosotros fuésemos sus habitantes más distinguidos y a semejante honor no pudimos decir que no. Así que, con 16 años y en plena adolescencia escenosa mi vida ya no tenía sentido.
Poco tiempo después (mi memoria ha borrado el dato de si fueron horas o años) mi madre regresaba de su trabajo. Despidiéndo y dando instrucciones a su chofer (¿teníamos chofer?) un ruidejo sacóla de sus pensamientos; ¿qué era aquello, ¡oh, andanzas del destino!? Era un maullido.
El “Toris” irrumpió en nuestras vidas de una manera que ya he narrado aquí y, brevemente les diré (again) que ese gato libró a mi padre de pagarnos psicólogos a mi hermano y a mi (aunque se los cobró frotando su gatoso cuerpo en sus trajes carítsimos) trayéndonos momentánea felicidad que duraría exactamente diez años, justo cuando otro gatito irrumpió en mi vida: el Matius.

Con Matius, ya lo saben, mi vida es el duro trajinar que no termina cuando se mete el sol y la canción de los cochinitos dormilones toca su último acorde. Con él es pan y cebolla; es brincar en la cama mientras él juega a otra cosa; es el mimarlo hasta el extremo de echarlo a perder con cuentos que nunca llegan a nada pero que lo mismo pueden contener un cohete espacial plateado y toda su colección de muñecos trepados en él (sí, también el famoso Topo Gigio rosa)
Es haber construido una fina complicidad matrioshki-hijoski que se desbarata cuando el padre ausente llega a casa. Es sufrir una apoplejía mientras se canta sin parar-sin cesar te quiero yo y tú a mi, una especie de transacción afectiva que raya en lo hiperbárico.

A tal extremo, lo último que querría en mi vida sería u otro hijo o una mascota.

Pero nadie manda en el destino de las demás cosas y personas, así que cuando la vida te da limones más vale hacer limonada. Y por eso, después de tanto mambo jambo, lo único coherente que les puedo decir es: el maldito gato chiquito que no se dejó adoptar hace una semana ha decidido ser parte de mi familia. Con toda su gatuna gatunez tuvo el descaro de maullar hasta decir basta, fingió amnesia a los hechos de la semana pasada y dijo, como sólo los gatos pueden decir: “pos fíjate que siempre sí me vengo a vivir a tu chante y órales, abre el refri que traigo el hambre atrasada” (Bitch!)
Pero ¿saben qué? Dicen que el que anda con lobos a aullar se enseña y yo he adquirido cierto “no gusto” por los gatos (#Escándala!....lo se, LittleEdward)
Así que aquí estoy, sola con mi soledad porque Matius duerme y la Marmota está en sepa la bola dónde, decidiendo si hago un huequito en mi corazón (¡y en mi agenda!) para adoptar un gato. Hecho que anteriormente no hubiera dudado en realizar y que hoy me causa bastante conflicto.
Esto es crucial, amigos. Si lo adopto, éste blog seguirá llamándose naturalmente “La Gatería”. Pero si no… definitivamente tendría que cambiar de denominación (tal vez “La No Gatería”)
Como siempre, “éstas son las cosas que me descomponen” diría el Sombrerero Loco…

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Un silencio luminoso.

A veces la vida nos pone en sitios de los cuales preferirímos ser únicamente expectadores o -si mucho me apuran- meramente actores de cuarta.
A veces la vida nos presenta situaciones incomprensibles en ese momento, difíciles y harto tristes. Y hay dos clases de personas en éste mundo: los hombres y las mujeres. Y de éstas últimas, también hay dos clases: las fuertes y las débiles.
De las débiles, cada quien sabrá de qué pata cojea y sobre ellas ni hablar. Dan hueva y repelús.
De las fuertes, una en particular, mi cariño incondicional, todo el amor, pensamientos y oraciones de parte de mi familia para la tuya.
Esto también pasará.
Las palabras, esta vez, se quedarán dormidas un momento.
Te quiero mucho.
Sí, ésto también pasará.

lunes, 29 de noviembre de 2010

Guadalupanismo de Clóset...

Antes que nada, guarden sus antorchas y azadones y abran su mente a lo que tal vez les parezca blasfemia o un claro ejemplo de que he sido poseída por el maligno (mientras sea el Diablo Guardián...)
Desde tiempos inmemoriales el ser humano es presa de sus miedos, temores y posibilidades de fracaso. Ser humanos es sinónimo de ser vulnerables a lo que la Naturaleza, el Cosmos o Walter Mercado nos sorraja en la cara cada que abrimos nuestros ojitos a un nuevo y tigresco amanecer.
No hay otra especie poblando el mundo que esté más atento al control de lo inasible, que el hombre. Ya parece que los pandas van andar consultanto los caracoles con Madamme Sazú (ten cuidado que lo están sonsacando) para ver si este año o el que viene por fin se extinguen.
¿O acaso las cucarachas se congregaron para hacer sacrificios, ofreciendo su cucarachosa alma a cambio de la inmortalidad? (es que ni el "Raid" les pega, me cae!) O sea, nosotros meros -y específicamente los mexicans curious- somos los más afectos a endilgarle a cuanto santo, divinidad, cuarzo, cola de mapache albino, polvos de la madre matiana o equis menjurge existente en el mercado de Sonora, la responsabilidad de nuestros actos.
Que si el marido es borracho, ai'stá el Estafiate curado con agua del Lago Ness; que si la mujer es infiel: dale su toloache masticado con los dientes que le tumbaste por "pérfida"; que si el hijo es burro: llévalo a que lo soben con el fondo de Doña Pachita.... o sea ¡qué fácil!.
Y están los que juran...
Discúlpen, pero ¿acaso estamos tan carentes de valor y voluntad que tenemos que ir de rodillas sobre pencas de maguey a prometerle a la morenita del Tepeyac que nos quite lo dipsómanos? ¡Y todavía se ponen a negociar!: "si me quitas lo borrachín en un mes, te JURO que ya no le pego a mi vieja".
Así que el problema de alcoholismo y violencia intrafamiliar no es cuestión económica, ni social, ¡ni siquiera es culpa de Salinas!. Es culpa de que "allá en el cielo nomás no me quisieron hacer el milgrito".
En un país tan carente de sentido común, yo estoy quejandome de ésto.
No cuestiono la fe de nadie, no intento "desevangelizar" a nadie ni romper con cánones establecidos. Cada quien su dogma y que con nuestro pan nos lo comamos.
Nomás no me tapen el carril de alta en la México- Puebla porque sea santo o no, yo a cualquier peregrino me lo voy a llevar de a gratis.
Advertidos están.

viernes, 26 de noviembre de 2010

A petición del público...

Maniana es un día importante. Es la reunión con mis ex compañeritos de la secu. Una reunión donde nos daremos cuenta cómo ha pasado inclementemente el tiempo y también viborearemos a quién le ha ido muy muy bien y, a quien no le ha ido tan tan bien.
Es inevitable, aceptémoslo. El comparar o medir nuestro éxito en función de otros es una aplicación con la que ya nacimos (así como el "vota por tu café favorito de Starbruts" en el Iphone) y que unos aceptamos crápulamente y otros simplemente se indignan nomás de pensarlo (pero bien que son víboras de clóset).
Las reuniones sociales pueden ser un asunto de vida o muerte. Cuando la autoestima la tenemos básicamente a nivel de subsuelo, la mera idea de encontrarnos con nuestros verdugos de antaño es razón suficiente para hacernos correr despavoridos, en busca de aquello en donde se refugian nuestras inseguridades, es decir: comida, videojuegos, sexo por compasión, por aburrición, por emoción...etc.
Y cuando traemos el EGO hasta el cielo, la impaciencia por que llegue el "soñado" día puede causar una gastritis espantosa, pues se cree que el tiempo no pasa lo suficientemente rápido para demostrarle a aquella fulanita que nos bateó lo "papis" que estan; o, en el caso de las mujercitas, lo "reinita" y "buenona" que se pusieron cuando otrora eran unas dulces nerdcitas de brackets y lentesotes (como quien ésto escribe...jajajaja)
En realidad, nada. Las convivencias exalumnáticas del ayer son para dos cosas:
1) Para carcajearse (again) de las burradas de las que fuimos, o víctimas o protágonistas, en nuestros años escolapios.
2) Para salir con un buen sabor de boca al darnos cuenta de que -GRACIAS A LA MAXIMA DEIDAD EXISTENTE- ya somos harina de otro costal.
Aplausos por las reuniones con el pasado, pues como lo cantaba el inolvidabilísimo Princhipe de la Canción: "ya lo pasaaaaaaaado, pasaaaaaaadooooo, no,no,no,no,no me interesaaaaaaaa, ya lo sufrí y gocéeeeeee...todo quedó en el ayeeeeer...ya olvidéeeeeee, ya olvideeeeeeee..." jajajaja. Aunque nadie me quita de la cabeza la idea de que ESA canción es para los ardidos.
Neta.
Y, last but not least, el pasado NO siempre es malo.... lo acabo de comprobar!
(mmmmm! rico!)
jajajaja!
Feliz Viernes!

martes, 23 de noviembre de 2010

Ni pies ni cabeza.

Soy desordenada. Desde que me dejaron de "encargada" de mi vida (a la tierna edad de nueve años, luego de un despótico reinado como hija única) la teoría del Caos ha encontrado en mi, a su mejor exponente.
El desorden es para mi como CIERTO gato ingrato, se va pero siempre vuelve. De adolescente a mi mamá le saqué ene mil cantidades de canas verdes, amarillas y de todos los colores. "Soy un desastre" le explicaba yo, timbirichescamente cuando, harta de pedirme que "escombrara mi cuarto", optaba por entrar con aspiradora por delante, a hacer justicia por su propia mano. Y pues yo sufría. Me tiraba mis amadas revistas adolescentes (a las cuales culpo de mi malformación y desinformación en cuestiones de hombres), rompía discos (jamás volví a encontrar el "Aquamosh" edición especial) y desaparecía todo lo que daba sentido -en ese momento- a mi vida: peluchillos, cartas de amigas y novios, fotos del artista juvenil del momento, dulces almacenados para fungir de provisiones ante el inminente apocalipsis, artículos de belleza varios...etc.
Lo peor de todo es que el ser desordenada me ha traido muchos problemas pero aún así no puedo cambiar. Mi mamá dice, años después de aquel drama doméstico y conmigo lejos de su casa, que probablemente se deba a que mi cabeza es la que no tiene orden. Puede ser... digo, no es tan descabellada su idea. Después de todo, mi día a día es una constante lista de súper, con pendientes y anotaciones que se deben resolver y atender. Y tal vez (sólo tal vez) mi manera de rebelarme contra todo lo que debo hacer (y que por supuesto no quiero) es manteniendo un perpetuo campo de batalla en cualquier espacio que ocupo: desde el escritorio donde escribo hasta toda la casa en la que habito.
Mi bolsa, mi clóset, mi carro, mi escritorio, mi sala, el librero, el refri, la cocina...¡hasta el baño! es un sitio tomado por el desorden. Y lo peor es que estoy contagiando horriblemente a Mateo.
Al rato llegará la aspiradora y no sólo irán mis tiliches en ella. Estoy pensando que un hot weels tapará el ducto de aire...
(interesting!)

jueves, 18 de noviembre de 2010

¡LA CIEN! (Y VAMOS POR MAS!)

Diablos, yo les había preparado un relato del por qué quiero ver la película "Red Social" (insisto, le hubieran puesto Facebook) de mi incursión en las redes sociales (allá por el 2006) y de cómo afectaron -y afectan- a mi vida.
Pero nel...resulta que ésta es la posteada número 100 de la siempre honorable y respetable GATERIA y nada me hace más feliz (es un decir, en realidad muchas cosas me hacen feliz, pero así va el convencionalismo).
La Gatería empezó como la continuación lógica de un proceso incursivo en la red, en un estado que las mujeres que han pasado por él me entenderán y las que no, sinceramente no les recomiendo -aunque al final, el resultado es BASTANTE satisfactorio-.
Así, en el 2007 y con 5 mesesotes de embarazo, quise darle un sentido más a mi vida y compartir con el mundo mis cuitas de recién casada y recién empanzonada. Al principio, todo se centraba en cómo mis hormonas percibían la vida; después abandoné el oficio al atravesar una muy dolorosa y hasta ahora comprensiva depresión post parto, en la que huí literalmente de la red. Pero el tiempo nada lo cura, sino los buenos psiquiatras (y si son guapos, mejor) y heme aquí, en una madrugada de jueves, mientras mi marmotita duerme placidamente abrazando a su Topo Gigio rosa y la Marmota Sr. anda en.... bueeee, dejémoslo en que anda de viaje.
Escribir siempre ha sido y es mi pasión. Efectivamente menos cinco lectores, erré mi profesión y no me arrepiento de ser abogada, se que en algún momento las letras se abrirán para mi y harán que mis torpes dedos hagan algo más digno que balbucear algunos escarceos. Es por eso que La Gatería es más que un hobby, es una manera de que mi alma descanse de todo lo que la atormenta en su día a día, salpimentando con anécdotas y hechos curiosos que definen a quien esto escribe.
Ex novios, malos jefes, buenos amigos, mediocres personajes.... todo cabe en la Gatería y mientras el mundo sea el lugar bizarro que es, yo no dejaré de tomar nota en mis ene mil libretas para poder mostrarselo a ustedes desde mi particular punto de vista.
Gracias amigos que leen ésto.
Y los que no...¿pus qué esperan?

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Bitchie Mood.

"Estar de malas", "Tener la hormona trepada", "Andar en tus días", "Amanecer con el pie izquierdo", tantos sinónimos para decir una misma cosa: Hoy mi serotonina se ha quedado dormida; pues sí, ¿qué querían?, yo soy como los animalitos y no me pueden mover mi reloj biológico así como así.
Y seguimos de protestones: No me importa que digan que ahorramos electricidad, energía eólica, herética, perética o la Ru. No me importa que con cerrar mis ojitos más "temprano" para abrirlos más "tarde" voy a salvar millones de vidas que el maldito Tsunami en Bora Bora ha amenazado. O sea, ¿por quién me toma el dueño del mundo? (tú no, Dios, hablo del verdadero "Master of Puppets"...ash). ¿Realmente crees que soy tan tarolas? Nooooooo, no por favor. Acepto que los hombres me mientan, que me enamoren bajo la luz de las luciérnagas y que me digan "coquito de fresa" (jajaja, neta!) pero no puedo aceptar la patraña del "Horario de Verano, horario de invierno". Con el Proyecto Haarp a todo lo que da, ¿¿¿creen los ineptos gobernantes que trabajan para nosotros (sí doña Bartola, el Felipe es su gato y el de todos nosotros) que me voy a tragar sus pitirijadaaaaas????... Se necesita cinísmo.
Pero volviendo al punto. Dormir mal me hace daño, neta; me pone como la hermana gemela, no reconocida y abandonada en una Iglesia del mismísimo Diablo. Algún erudito dirá que no se manejar mi inteligencia emocional, o que no se trabajar -y vivir- bajo presión: me vale madres...en un mundo donde la "libertad" del ser humano se defiende a bola de catorrazos y -ejem- toques de queda, que yo miente madres por no acompletar mi sueño de belleza debe ser como la pelusa en el hombro.
Aún así, dentro de tanto veneno que necesitaba escupir (como bien lo dice mi adorada amiga Carmen), gracias amigos universitarios porque verlos la semana pasada, ha hecho MAS miserable mi vida al constatar que, efectivamente, la juventud y mocedad se han ido de nuestras vidas para siempre. ¿O no?, ¿o no?...
Por  otro lado, un abrazote ENORME para el niño travieso que se esconde entre la hierba y que está enfermito, espero que pronto te recuperes porque personas como tú, hacen que mi vida valga la pena.
Y por supuesto, a toda la bola de mis menos cinco lectores de siempre.....los quiero...sniffff...(vuelvo a repetir: BENDITA BIPOLARIDAD!)

Bueno, después de todo, el ánimo sí mejoró.

viernes, 5 de noviembre de 2010

I'm a luser.

Poco a poco voy cayendo en la cuenta de que vivimos atrapados en un laberinto para hámsters.
Y no importa si eres el hámster más gordito o gracioso, el más listo o más kiut. De todas maneras te lleva la ch...esa mera.
Cuando voy por la calle, camino temerosa hasta de mi sombra. Creo que el paraguas demás de ser un objeto necesario contra la lluvia, es el arma más eficaz de la mujer moderna. No me burlaré ya de las abuelitas que lo cargan a todas partes, ya sabes? Aquellos que parecen buitres plegados sobre si mismos.
No les he querido contar del besito que le di a una camioneta porque ps no quiero echar más leña a la pira llamada "las mujeres no sirven para manejar". Eso no es verdad. Las mujeres "servimos" para eso y para más.
Por si las dudas, por salud mental y por que se me da la gana, canto a todo volúmen lo que Beck me enseñó: "Soyyyyy un perdedourrrrr...I´m a loser baby, so why dont you kill me..." jajajajaja!
Ya, adiós.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Pagando cuentas...

Es imposible (y hasta un poco triste) llegar a los treinta sin tener el corazón roto o, en su defecto, haber roto corazones a lo largo de una vida.
No es cuestión de gracia o de risa, pues vulnerar a un ser humano, además del karma que uno carga, lentamente va mermando la capacidad de amar.
Y por partida doble que nos rompan el corazón, aparte de rompernos la madre y el esquema, nos deja con chichones muy difíciles de olvidar.
El Karma es cuestión moral, uno puede creer en ello o simplemente ir por la vida actuando de acuerdo a su institnto sin pensar en las consecuencias.
Cuando el destino nos alcanza y nos presenta la factura de lo que debemos, sentimos que el universo no basta para escondernos de tan nefastas consecuencias. Ahí sí nos encomendamos a todo lo encomendable para salir lo menos raspados posible.
Ay, pero somos humanos finalmente... y a nadie le gusta sufrir, a nadie le gusta sentir pesados los párpados.
De golpe me ha llegado el destino, me presentó una factura que había endosado hace mucho tiempo... creí que jamás me cobrarían lo que debía.
Pero no.
La vida es y sigue, en cualquier modalidad; como el lugar común de un río que fluye sin detenerse...
Te deseo de todo corazón que tu felicidad sea eterna, gozoza... Tal y como lo mereces.

viernes, 29 de octubre de 2010

Son tus pensamientos, mujer.

Pues no se...estoy muy decepcionada de la mentalidad "rico de provincia" (con todo respeto para los ricos y/o de provincia) que ostentosamente pasean los dueños de cierto lugar que pensaba yo rentar.
Y bueno, mi asombro es ante la falta de necesidad econòmica que tienen estos dueñito. Guauuu, ¿cómo le hacen para preferir mantener cerrado un lugar en vez de rentarmelo?
En fin, que con su pan se lo coman, total, La Gatería es y será en donde quiera que esté.
Por otro lado, me habìa rehusado fuertemente a aceptar que, entrando al umbral de los treinta, la salud y la calidad de vida empezaba a disminuir. Me sentìa tan fuerte y poderosa basada en el hecho de que según expertos, nuesto cuerpo se regenera atómicamente cada 7 años. Así que pensé: "ps total, llevo dos añitos circulando, ando como nueva..." si chucha... traigo UN POCO adoloridas las rodillas pues al tratar de seguirle los pasos a Mateo, éstas se han echado pa trás -literal- y me han dejado tirada, respirando el polvo que ha dejado la carrera de mi hijo. Ni hablar, pasénme el cartílago de tiburón, el calcio de coral, la uña de gato, la piel de víbora panteonera porque de ésta ya no me levanto.
Como tampoco me levantaré de la tristeza que acabo de pescar:
Llamenlo "desorden hormonal", "transtorno generalizado de ansiedad" o una franca indisposición de ánimo, el chiste es que hoy al ir a pagar mi licencia, me topé con la noticia de que Monica Braun dejará de calentar cabezas y despertar florecitas en su columna de Chilango.
Dios!!! ando tan sensible en éstos días que me puse a llorar -bueno, no a "llorar, llorar" pero casi-, o sea, se me "rozaron los ojitos" al ver su columna de despedida... y no es que siquiera me caiga bien (siempre pensé que estaba un poco sobrevalorada). Yo creo que, efectivamente, es la maldita edad. Ella ha estado en esa columna durante el tiempo que duró mi soltería y alguna que otra vez me reí con sus sexualosas confidencias.
Me pregunto, ¿quien será la próxima cronista erótica de ésta ciudad? En una de esas hasta me ando postulando... ¿les parecería? Manden su respuesta al Facebook.
Así las cosas, muy adorados menos cinco lectores, ando muy sensible, lloro de todo peeeeeero-oh sí- también ando muy feliz con el "Reencuentro".
Y no, no es el de OV7 (ni soñarlo).

miércoles, 27 de octubre de 2010

Dana at Downtown.

Y así es como uno se hace ruco... simplemente las cosas dejan de pasar.
Solamente un día te levantas de tu almohada babeada, calzas tus pantuflas apestosas y dispones a salir al mundo... a encontrar el MunArt porque la vida ha ido tan rápido que simplemente te lo han cambiado de lugar.
Y cuando por fin hallas una esquina poética donde desfogar estos pensamientos, resulta que ya traes en blanco la chaveta porque alguien (puede ser un ser superior o simplemente el maldíto alemán) ya se encargó de vaciartela (sin albur!).
Pero no importa, total, traes a Interpol (+) haciendo círculos con tus pocas ideas del día de hoy. Traes ganas de que sucedan cosas.
¡Y pasan!
Ayer fue una epifania recorrer mis antiguos terruños. Se burlan de mi pero viajar en metro fue una cosa que no hacía en mucho tiempo y ¡hasta me sorprendió que ya costara $3 peso!.
Antes antes, mi habitué era andar en el metro y en las peseras y córrele para acá y el metrobus y el trolebús... y era un gran pain in the ass, la neta. Renegué como cuando vivía en Insurgentes Centro y renegaba de no vivir en una unidad y carecer de amigos. Y cuando lo tuve, supe lo que había perdido, exácto, como los buenos amores que una deja ir.
Pero bueno!
Tengo una historia muy personal con el Centro Histérico, tengo toda una vida de recuerdos felices, anécdotas y continuidades con Kary y ayer, vivir ambas cosas fue todo un placer.
Max Ernst y sus grabados nos sirvieron de fondo para relamente atender lo que es importante: los amigos, el convivir y dejar y que nos dejen una huellita, pequenia pero muy certera, de lo que en verdad trata la vida.
Gracias a lot!

viernes, 22 de octubre de 2010

No pago, no pago y no pago!

Tema delicado es el de los impuestos.
A nadie le gusta tener problemas con Hacienda, porque en un mal descuido  puede suceder que te quedes hasta sin calzones. Hacienda es y será como las malas mujeres de los corridos norteños: maldita con los buenos y seductora y coqueta con los malosos.
Así es, como otras injusticias en el Mexiquito de hoy.
¿Que por qué le tiro hoy mala leche a "Doña Lolita"? buenop, no sólo a ella en particular sino a todo el sistema fiscal-financiero de éste país.
Y no es que me azote con mis millones, o que tenga embargadas toneladas de bagre en el golfo y se me estén echando a perder. Es simplemente que no se me hace justo que Hacienda y la Secretaría de Finanzas del Edomex me estén chingando para que pague mis impuestos so pena de CLAUSURAR mis negocitos y dejar en la calle y en la miseria a toda mi familia...snif, snif....
Imaginense, yo con sangre, sudor y harrrrrrta lágrima puedo mantener -ya ni siquiera repuntar- mi negocio, pago altísimas rentas, pago empleados, pago mercancía, pago menudencias que salen en el camino y trato de generar empleo y bonanza a mi alrededor para que de buenas a primeras lleguen dos enanos a cerrar mis cortinitas por no mocharme a tiempo con el estado. Y peor, ok, ok, ahí'stá tu varo, Felipe, ya no chilles.... pero entonces la economía informal que no paga rentas ni empleados ni menudencias ni los impuestos, llega con la mano en la cintura, a vender mercancia robada y a mi me pasan a dar en la Eva (es que así se llama mi madrecita santa)
CARAJOOOOOOO!!!!!!!
Tons ¿cómo le vamos a hacer, papá? Quita a los tianguistas o descuéntame mis impuestos.
Porque mi hijito no va a dejar de tomar su lechita nomás por tus .....
Ayyyyy muchachos, pues así están las cosas.

lunes, 18 de octubre de 2010

Ruckeando en el Corona Capital...

Queridos, amados, muy estimados menos cinco lectores de siempre:
Contaré lo que sucedió el sábado 15 en el mentadísimo concierto del Corona. Si algún dato muestra imprecisión, les ruego lo atribuyan al exceso de cebada en la sangre de quien esto escribe.
Después de muchos dimes y diretes con los boletos en cuestión, -que si los tenía la prima de un amigo, que me los iba a dar en pagos, que si me los entregaba en una esquina, con camioneta de vidrio polarizado y a la sorda- etc, resultó que el mero día no tuve boletos ni nada parecido. La desesperación y el emperramiento hicieron presa de mi, aunado a la pena de decirle a Carmen "...esteeeem...jeje, todo es tan relativo y resulta que no tengo los malditos ticketes".
Con el desaliento plantado en la cara, corrimos a las taquillas del Foro Sol y ahí conocimos a fondo la codicia de OCESA (o quien chingados haya organizado el toquín), quien no teniendo reparos ni escrúpulos, se dió el lujo de subir de precio las anheladas entradas. Primer sablazo.
Pus ya entradas en materia y en calor, comenzamos a relajarnos y a ponernos cómodas. Corrimos cual Heidies en la pradera al estanquillo de las burguers y chelas pa entrar en ambiente. Los acordes de Chikita violenta se escuchaban de fondo mientras engullíamos con singular alegría la mencionada dieta toquinosa y nuestros estomaguitos pedían clemencia, que no nos fueramos a manchar con las chelas...jajaja, díganme ustedes: si nadie le hace caso a su corazón o cerebro, ¿creeran que lo íbamos a hacer con la panza?.
Cual escualos nos movimos a ver a Regina Spektor y su din, din, dinosaurio...hermosa, sublime...Parecía un ángel mientras cantaba: "Fidelity" y yo a punto de poner los ojitos en blanco cuando...ok, vamos a movernos.
Esperamos a Echo and the Bunnymen; salieron muy guapitos y ruquitos a tocar, se aventaron la puntada de amarrar el "blues de la cabaña" y hasta ahí eramos medianamente felices en nuestro espacio vital. Llegaron las gringas pandrosonas y pachecas y ahí vimos lo que era llorar sangre por los ojos...No la chinguen!, aquello era pior que las sesiones con el brujo escaldufo....
Anyway, el ánimo no decayó hasta ver a Interpol. Yo había olvidado, debido a los tres meses que llevo fuera del DF, lo que era la vibra chilanga.
Llámenle "chaqueta mental" ¡pero los defeño somos la neta!... o sea, será la capital de la basura, las viejas se sienten la nueva "Keit Mos en Glastonbury" con sus botas de hule "Junter" y la rú, los güeyes cada día se vuelven más metrosexualosos y los chavitos moco son más pendejos que antes (discúlpenme chavitos moco, pero no es "atasquémonos qui'hay lodo") pero no hay nada como vivir en el D.F.
Total que Interpol.
Ps ya, aquello era dejarse llevar por la manada que oscilaba a un lado y al otro al ritmo de "Rosemary" y enfurecida brincaba cuando "We spies we slow hands" sonaba a todo lo que dió (el sonido fue excelente).
Me sentí feliz de vivir esta experiencia junto a mi amiga Carmen, porque aquello tuvo un sabor a remembranza y nostalgia por la juventud que ya se fue.
Me devolvió un poco lo que había perdido en el camino y me dió esperanza y provisiones para continuar en el viaje.
Exácto, como las mismísimas piedras rodantes.

lunes, 11 de octubre de 2010

Volverte a ver...

He contado muchas anécdotas de mi época de escolapia y puedo decir que la mejor etapa de mi vida fue la Universidad. ¿Por qué? bueno pues básicamente porque dejé de sentirme como Katty la Oruga y di paso a mi esplendor juvenil...(cualquier cosa que eso signifique).
Así conocí a mis amigos, de los que ya les he platicado, pero también conocí a personas que ni me agradaban y para colmo de mi paranoia al revés ¡yo tampoco les agradaba! (#escándala)
Y para que ustedes juzguen por si mismos, les diré brevemente que yo era MUY popular en la Uni...(ok, ok, no, la verdad no era popular pero me gustaba sentir que si) y también me gustaba hacer barullo en clase, ya fuera con atinados comentarios a propósito de las reformas al código en comento, o para soltar algún dato de cultura general que en verdad me hacía ver como un auténtico fenómeno de biblioteca.
Tal coctel de personalidad caía bien en algunas personas, pero en otras francamente las hacía vomitar y, preciándome del don que hace presentir la personalidad de la gente, obvio es que me daba cuenta quien de plano quería ver mi cabeza colgada del cubículo de Derecho.
Dicha animadversión que mi persona despertaba en esa gente me gustaba, la neta.
Mi filosofía era: "bien o mal, pero que hablen". Así que terminaron mis años escolares y dije: ps total, no los voy a volver a ver....
Sopas!
Llámenle destino, karma o una franca indisposición de ánimo del creador, el caso es que hoy hoy hoy hoy me topé cara a  cara, frente a frente con una de esas chicas a las que yo hubiera querido jamás toparme en mi gata vida.
Lugar: El Wal mart de mi pueblo
Yo iba instalada en la divez, latigueando a Marmota pa que se apurara con el súper cuando de repente que nos damos el encontronazo con los carritos del supersh y ps las dos nos quedamos sacadas de onda, a mi me ganó la risa (como siempre me pasa en los momentos menos adecuados) y ps  que la saluuuuudo, con abrazo y beso de judas: -Hola "C", cómo estás? no, ps que bien; no ps que cuanto tiempo; no ps es que me casé; no, ps es que yo también; no ps es que tengo "n" hijos; no, ps que yo tengo dos marmotas... y así.
Intercambiamos teléfonos y toda la pesca.
¿Y saben cual es el colmo de haber cumplido treinta? (treinta Tony, TREINTA)
Pues que la neta... me dió chingos de gusto verla.
Carajo!

viernes, 8 de octubre de 2010

Oh..."eso".

Voy a contarles una historia triste:


Hace mil años, hubo una chica que lo único que quiso fue dejar correr los días de su vida tal como el agua corre por el wáter cuando se es ecológicamente irresponsable.

Tenía en ese entonces roto el corazón y la cordura. A pesar de todos los que la rodeaban, necesitaba una guía, apoyo y consuelo; esto lo sabía y lo deseaba, pero a la vez también le rehuía al compromiso. No quería ningún apego ni nada que significara atadura. Iba como las goletas a la deriva…

Y en éste tedioso discurso de un alma sin rumbo, fijó su existencia en el cliché de las películas americanas. Ver el cine como si vivera una doble vida la alejaba de las calles peligrosas aunque también de su familia, amigos y todo aquello que nos ayuda a crecer como persona. Escuela incluida. ¡Pero no pasaba nada! Asombrosamente no sucedía maldita la cosa.

Tenía un novio, tenía amigos, tenía a sus padres y hermanos, un pasado impecable, una casa cómoda, una mascota que no la esperaba en las noches pero que fregaba por el día.

Y aun así, ella necesitaba más. Y se entregaba al vacío como te entregas al destino más incierto; y las mentiras para encubrir su “estilo de vida” se hicieron parte de su piel, tanto que hasta olvidó lo que era el sabor de la verdad en los labios. Pero no pasaba nada.

No se drogó, no se convirtió en dipsómana, no se prostituyó ni durmió en las calles… ella únicamente dejaba transcurrir el tiempo, guardándose en los cines como una oruga se encierra en su capullo, solo que al final de la película no saldría una mariposa.

Pero, amigos, en serio que no pasó nada. Y ésta falta de reacción (momentánea, claro, el karma es algo más que un lugar común) la tenía al borde del abismo. Y dejó caer su brillo desde un puente. Del mismo puente en el que algún día contempló aquel planeta y dijo: “ya no queda más”.

Y fue cierto, amigos.

No quedó algo más.

lunes, 4 de octubre de 2010

¿DE QUÉ LES PLATICO?

Quiero escribir. Neta que sí.
Pero a la hora de elegir tema, entro en conflicto con todas las aristas que forman la terriblemente bunaparanada mujer que soy. Y digo: "a ver, ahora les platicaré que atropellé al perro de mi vecina y así se van a reir y a darle la razón al poli que vino a echarme pleito y a -JAJA- tratar de quitarme mi inexistente licencia de manejo"; pero ps a la hora en que puedo conectarme al interneps, ha pasado la euforia del momento, el acontecimiento ha dejado de ser gracioso para dar paso a las preocupaciones acerca de mi nuevo apodo (¡"La mataperros"!, ¡háganme el usual chíngado favor!, ¡si ni siquiera se murió!) y la erogación dolorosa de las curaciones de "Fluffy" (píiiiinche nombre).
En otras ocasiones he querido contar anécdotas de antiguos amores, sacar a relucir los trapos más sucios de cierto "ente" que se dedica a "..." y vive en "....", allá por el año de 20.. (como en los libros de Jane Austen), pero entra en mi la cordura y digo: "noooo, ps ¿quién le pegooo?, 'ora resulta que voy a hacer famoso a quien no se lo mereceeeee". Y la cosa termina en mero trámite.
Y ASÍ ME LA PUEDO PASAR TODO EL DIA, PERO PUES YA ME TENGO QUE IR A HACER MI QUIACERRRRR...

jueves, 23 de septiembre de 2010

GRACIAS A LA VIDA....

Ok, lo siento; me tiro al drama de cabeza y sin poner las manos, pa caer de puritito hocico sentimentaloide. Sucumbo a mis más profundos deseos narcisitas para hacer ésta entrega y ¿saben qué?, esta vez no me reprocharé nada puesto que este es mi último post veinteañero y si en el anterior me azoté por tan sobado tema, ahora me regocijo (así es, bendita bipolaridad, tu sais).
Doy gracias a la vida, a la máxima deidad existente, a mis papás por decidir traerme al mundo en un arranque de valor a pesar de su cortísima edad, a mi hermano David "Dr. Mitocondria" por ser mi compañero de traumas y alegrías familiares. Gracias a todas y cada una de las personas con las que he tenido la fortuna y la desgracia de haber convivido, sí "Matón de cuarto de primaria", te agradezco el hecho de haberme traumado al burlarte de mis dientitos de conejo, o a ti "Rosita, la pegalona" que en kínder eras el azote de todo el salón con tus marrullerías, por haberme tirado del columpio descalabrándome y dejando que muchas de mis neuronitas conocieran la luz al final del túnel.
Gracias a toda mi familia paterna por heredarme este repinche carácter que me cargo, pero sobre todo, por darme el ejemplo de cómo no ser cuando sea -más- grande y por pasarme tantita sangre oaxaqueña que, como los tamales, el chocolate y los chapulines, no a todo mundo gusta.
Gracias a CIERTOS integrantes de mi familia materna porque me han enseñado que compartir la misma sangre no es sinónimo de compartir la clase, la educación y sobre todo el sentido común. Gracias a mis primas Lluvia, Daniela y Fernanda por ser el paño de lágrimas, la cómplice de aventuras y un hombro donde llorar.
Gracias a todos mis amigos que han compartido conmigo su valioso tiempo, su entrega, su buen o mal humor, alguna anécdota o hecho curioso. Por ser un pilar en mi vida que, como la salud, tiendo a descuidar y no saben cuánto lo siento chicos, no quiero ser como los políticos en campaña pero creanme que hago lo posible por no perderles la pista. Gracias a mis amigos de la primaria, de la secundaria, del ballet, de los scouts, del inglés, del francés, de la prepa, a los del KFC, de la Universidad, de la vida, del trabajo, de borrashhhheras, amigos de mis amigos que ahora son mis amigos, de la Guay, del Myspace, Facebook, a la Familia Frutaaaal...en fin, a toda la gente que he tenido la dicha de conocer.
Gracias a todos los novios que tuve, gracias a los abogados, a los ingenieros, al doctor, al contador, al Dj, al ¡chamán!,a "cachetitos de manzana y Humpty Dumpty" al del KFC, al bajista, al rockstar, al que vendía seguros, al psicologo (que me dejó piorrr), al "robavacas", al "adicto a las sustancias ilegales", a los "buenos para nada" (qué, seguún mi Papá, tooodos caben en ésta categoría), al jovencito, al veterinario...uuuuffff...¡y todavía falta!, jajaja.
Y...claro, gracias a mi nueva familia, la mía, mía, mía.
Gracias Marmota por ser "the one" y por cooperar para concebir al ser más especial de toda la galaxia: mi hijo Mateo.
Gracias marmotas por hacer de mi nueva vida un caos, pero un caos que al fin tiene rumbo y dirección.

¡QUE VENGAN OTROS TREINTA Y MÁS!

Y gracias a ti, por leer La Gatería.

lunes, 20 de septiembre de 2010

No hay plazo que no se cumpla...

Estoy a un pelo de cumplir treinta. Es una edad importante y para mi, es una edad aterradora.


Cada decisión que he tomado, por muy pequeña que sea, se ha convertido en una bola de nieve que crece y crece, aplastándome o llenándome de nevosa felicidad. Pero ha quedado para la posteridad, como aquellas fotos de secundaria en las que lucíamos sendos copetes bien crepeado y esos brackets, tratando de enderezar unos dientes austinpowerescos.

Honestamente, no me imaginé cómo sería yo al cumplir treinta.

Sabía ciertamente que no podría ser como mi mamá (a esa edad ella batallaba con dos criaturas de 10 y dos años, respectivamente. Con trabajo fijo y estable como abogada en el área de amparos del entonces Departamento del Distrito Federal y con una pequeña, pequeñísima histeria, que se volvería hereditaria). Pero tampoco sabía qué sería de mí.

Y sigo sin saberlo, pa que más que la verdad.

Hace poco bromeaba con Marmota (que por cierto, en eso de los treintas ya es todo un experto) comentando que no podía ser que ya le estuviera pegando al treintón y yo siguiera peleada con mi adolescencia… y reíamos ¡jajajajaja!, pero al término de la risa, quedaba aquello que yo llamo “posos de conciencia” los cuales me indicaban que no era del todo broma aquella afirmación. Sí, sigo peleada con el pasado, MI pasado.

Es un fardo que no puedo soltar y que me niego a comprender para evitar más errores en el futuro. Soy como los adictos moderados, que saben lo que su adicción les acarrea pero aún así, no pueden prescindir de ella.

Mi pasado me condena, me tiene sentada en un banquillo acusatorio con la luz cegadora en un alto wattaje, cuestionándome todo el tiempo por aquellas malas elecciones que tomé y que por más que terapeutas, psicólogos, metiches, buenas conciencias, buenos amigos, malos amores, etc., intenten echar de su cosecha, pues nadie puede quitarme de la cabeza esa comezón que Pastilla canta tan bien.

Por eso me resisto y me enferma cumplir treinta. Porque es como una bofetada en la cara, el pasado y me tortura y yo me dejo torturar…

Aunque, cuando sale el sol y entibia un poco mi corazón, me doy cuenta que pues ni pez, Acuamán, la vida sigue y ahora no sólo yo dependo de mi poca o mucha imaginación para salir adelante.

No me tiro para que me levanten, esa acción de tan sobrevalorada, da franca hueva. Se que en unos momentos más, mi bendita bipolaridad me tendrá de nuevo contenta, cantando “tú mi complemento, mi media naranja…” y yo seré feliz, feliz como esas inconcientes que pululan en el espacio, sin más preocupación que traer hijos al mundo para que otros los mantengan mientras ellas se dedican a lo que mejor saben hacer… y que les sale ¡tan bien!

Ta bien, ta bien, estoy asustada. Es normal, creo yo, y como otras veces se que caeré parada, como mis buenos amigos los gatos.

Porque no de a gratis esto es una Gatería, ¿o no?

viernes, 10 de septiembre de 2010

Un paso adelante...(ni modo, Deff Lepard)

Segurito que soy la vergüenza de mi madre por ventilar impunemente, de una manera pública y bastante escandalosa, cuanto pasa en mi vida; pero yo aquieto su preocupación haciéndole saber que ps que nada más me leen mis -5 lectores de siempre y que, por más candela y suspenso que le eche, mi deficiente sintaxis apenas puede provocarles una muy sincera cara de “¿uh?”.
Así que, ya con la conciencia tranquila y el intestino relajado, me dispongo a contarles que:
• Mateo volvió a la guardería donde mantenerlo sano nos cuesta alrededor de $8000 al mes (honorarios médicos NO incluidos) y nada, que es una auténtica pachanga convencerlo todos los días a que entre a la escuela.
• Por lo tanto, me he reincorporado a la vida “laboral” (entrecomillado, si, si) tratando de malabarear mis dos neuronas encargadas del Management para poder entregar resultados dignos de una esposa-gerente.
Así es, vuelvo a supervisar niñas respondonas, berrinchudas y harrrrrto mañosas, PERO ¡JA!, no cuentan con que haber pasado medio año enclaustrada y peleándome con los pinches gatos callejeros, me ha agriado el carácter de tal forma, que haría llorar al mismito niño dios.
No más: “…eeeestee… ay señora, ¿qué cree?... que ayer faltaron $400 pesos en la cuenta”, y yo: “(entripado por dentro, sonrisa benevolente por fuera)… ok Chimina, te lo descuento poco a poco…”
¡Nel, ‘ora trabajas horas extras, ca…bezona!

• Y por pura inercia, pasaré pocas horas en mi casa, donde me traumará menos el hecho de que el agua se tira o no cae, el gato se zambulle felizmente en mi basura, las arañas se meten y conviven con nosotros tranquilamente o que el agreste clima es capaz, sin remordimiento, de arruinarnos una perfecta tarde de parquecito.

• And “last but not least”: me urge saber de un buen hipnotista, puesto que no supero el TERROR a manejar en carretera, con toda la fauna rodante que ya conocemos y que hace de mis nervios lo que su faunorodesca gana le da (as always).

Así las cosas, como dije al principio: a mi mamá le podrá avergonzar todo lo que les he platicado, pero de lo que sí podrá estar orgullosa es de mi impecable ortografía (que ese tema se cuece aparte).

Aburrrrrrr.

viernes, 27 de agosto de 2010

FELIZ ANIVERSARIO!!

Soy Dana, tengo CASI treinta años y hoy cumplo tres años de matrimonio.


Escribo esto a una hora en la que debería estar dormida, emocionada como niño en vísperas de día de Reyes, o en su defecto, gozando como enana las ventajas de “dormir” con la pareja de manera “oficial”, sin el nervio de andar apagando el celular, inventar pijamadas en lugares donde no existe el teléfono o pagando a la mejor amiga por sus servicios como tapadera.

Pero no.

Frente a mi computadora trato de digerir lo que sucede: que no habrá celebración, que me he casado con un workaholic y que de plano la situación económica no está como para tomarse un día de descanso para celebrar tan magnífico acontecimiento. (Pus mientras me cambie el carro…)

No se qué postura asumir… por un lado, mi formación universitaria, mujer de ciencia y librepensadora me dicen que pa qué hacerla tanto de emoción, si es un día cualquiera; no es algo específico como, digamos, la navidá ¿no?, en la existe tal enajenación por parte de la mercadotecnia que los miles de grinchs que pululan por el mundo alegan que “todos los días deberían ser (aquí ponga el festejo que más le guste: navidad, año nuevo, día de las madres, día de los padres, día de las mascotas perdidas en accidentes automovilísticos, día de las carreras en ropa interior de zanahoria, ad nauseam) y no sólo recordarlo una vez al año.

¡Pero estamos hablando del matrimonio!

¿A quién en su sano juicio le gusta recordar los 365 días (y 366, por si es bisiesto) que se encuentra sometido, amarrado, juntado, pegado, matrimoñado precisamente los trescientos sesenta y tantos días de toda su vida?

Aunque por otra parte, el lado más suave y menos cínico que coexiste en mi cerebrou dice que cómo es posible que intente hacerme la fuerte si muy en el fondo, también recibí la educación telenovelesca Barbi-Ken y que muero por celebrar con cenita, piojito y besito éste día.

Y alega, además, que por qué me estoy haciendo la sarcástica cuando bien se que me duele dejar pasar éste día, teniendo yo (como en todos los matrimonios) el 50% de la responsabilidad (que no la culpa) de no tener festejo.

Irónicamente, a raíz de haberme casado, dejé de ser la Dana detallista que ustedes, queridos ex novios conocieron, para convertirme en alguien más práctico. No cartita, no regalito, no cenita. ¿Y me enojo por que yo no recibiré algo? Pues así ni cómo ayudarme, ¿verdad?

Conclusión: Gracias, Máxima deidad existente, por dejarnos llegar vivos y medio cuerdos a éste tercer año en las carreras de resistencia amorosa y gracias porque por lo mismo, tenemos un hijo que goza a sus padres juntos (y, pues sí, ¿a quién engaño?, felices).

Tan tán!



viernes, 13 de agosto de 2010

Una cita para Dana.

Ayer por la tarde dejé encargado a Mateo con su abuela; ¿el motivo? tenía que sacar tejido muerto del cerebro y de mi relación con Marmota. Para nadie es un secreto que desde hace dos meses nuestro hijo no se ha recuperado de una misteriosa infección en la garganta, que aparece cuando va a la escuela y desaparece cuando reposa en casa.
Tonces, estos dos meses de cuidados intensivos marmotescos, aunado a una incomprensible, inútil y francamente dolorosa mudanza hacia el Edomex, han mermado mi capacidad intelectual y afectiva, producto de repetir como un mantra diario: "tup turup tup Dooooraaaaa!...Dora, Dora, Dora la exploradooooooraaaa..."... Shoot meee!!
Así que ayer hubo una comida donde en la mesa no se sirvieron papitas fritas en forma de carita feliz, ni pankekis arco iris, sino una rica pizza italiana con setas, peras caramelizadas, gorgonzolla y avellanas. Tampoco se bebió juguito de cocofresa, sino sendas copas de vino tinto "Tall horse" (ni muy bueno, ni muy barato y hasta creo que me piñaron), ni se pidió el area de "no fumar" sino al contrario, el área de terraza para fumarrrrrr como los malditos chacuacos que somos.
Y bueno, aquello era casi una experiencia religosa para mi, casi llegando al éxtasis de la adultez y sintiendo los efluvios de la soltería embriagando lentamente mi cerebrou...hasta que llegó la hora del cine y ps ¡papas!.
"Mi villano favorito" estoy segura que es una buena película, es chistosita y mona si ustedes quieren... ¡pero para verla con niños, caramba!... qué tenía que andar viendo esa peli cuando la atmósfera era perfecta para olvidar por un segundo que mis días transcurren de acuerdo a la temporada de Hi5. Y más: chingos de niños salidos de nosedónde, armando sendo revuelo en la sala, que aunque estabamos en "lo mejor de Coapa", valióles madre para sus llevar a cabo sus propósitos bandalescos.
Pus ya, bien resignada me chuté la peli, la cual extrañamente mi grinchesco marido amó y disfrutó al grado de que la quería volver a ver y a mi no me quedó más remedio que echarme una pestañita en lo que llegaban los créditos, los cuales, por cierto tardaron aaaaaños en llegar, por abusar de la presencia de las cositas amarillas...hummm.
Lo que me queda claro es que fue una linda cita, novié con mi esposo como hace mucho no y lo mejor es que al regresar a casa, mi hijo estaba feliz de haber pasado tiempo con sus abuelos y aquello no terminó en drama.
Amo a mi hijo, lo saben y lo se. Pero también amo a la persona que soy cuando puedo hilar dos frases graciosas en mi cabeza y éstas no tienen nada que ver con "Lazytown" (que lo único bueno que tiene es al sujeto en leotardo azul).
Fin.

miércoles, 28 de julio de 2010

Por que parece que me persigue el fantasma del ayer?
Pero no, Dana, esas son solo alucinaciones estivales, sumisas y completamente inutiles.
La calle de la casa materna ofrece un trayecto para pensar. Camino sola y no lo creo, en verdad no creo que tengo este tiempo para paladearlo, para sentir su aroma cayendo como una lluvia fina de incienso. Tu tienes la culpa, sabes? tu que eres el resumen del fracaso y del error, el antes y el hubiera. Pero no pasa nada, viste? no pasa nada y entonces yo me quedo con el dolor de saber cuantas veces he fallado, cuantes veces he vivido en el error y vaya! no pasa nada.
O no pasa algo, da lo mismo, sabes? por que es nulo.
Aun asi, gracias. Dices porque me agradeces?, por que tienes esa mirada que entristece a la misma luna? y yo digo no pasa nada, de veras, no pasa nada. Tu sucediste hace muchos anios, muchos... era incomprensible pero sucediste. Y desde ese instante uni mi destino a tus caprichos, pero no pasa nada, sabes?
De mil maneras he querido que sucediera y solo me contente con rumiar el azar, de ma

viernes, 23 de julio de 2010

Estoy sentada, con la oreja perforada de tanto trancazo musical que cargo en mi ipooood y tratando de encontrar tema para mi post de cada viernes.
...
Pero no. Qué malo es cuando tus historias chistosas y personales pasan delante de tus ojos tan rápido que ni siquiera los suspiritos pueden darte idea alguna de lo que dirás a continuación. Esto al ritmo de "Age of Aquarious" de Fifth Dimension como musicalización.

Aunque ahora que lo pienso, recuerdo mucho una vez que, corriendo el año 1995, me encontraba trepada en la ventana de mi depa, en el último piso sobre Av. Insurgentes Centro, esq. Gómez Farias, en el D.F.; y mientras la lluvia hacia de las suyas, como en toda su lluviosa vida, me dedicaba a escuchar los gritos de los ¡cientos! de padres de familia que ¡exigían! que sus vastaguitos fueran admitidos en las prepas y ceceaches de la UNAM.
Y yo, cual viiiiil gato goloso, los veía pasar y pasar, pensando y regocijándome con el hecho de que yo sí me había quedado. Y justamente sonaba "Age of Aquarious", pero en un espantoso cover de una tal...mmmm...Analí, I guess, que jocosamente transmitía la eeeeexitosísima "Pulsar fm, 90.5".
Quien diría que un año después, yo tambien estaria llorando a mares por una inminente mudanza, un corazón bien trapeado y un año escolar completamente reprobado...bueno, no completamente pero casi.
Y ps ya.

viernes, 16 de julio de 2010

Cu cú!

Las instrucciones de mi laptop eran bastante claras: "puedes descargar todas las madres que desees, no necesita antivirus, el adobe aunque ni sepas usarlo ya viene incluido, PERO por ningún estúpido motivo, puedes fumar enfrente de la pantalla plasmosa"... Bah!
Es una noche lluviosa (quiero decir, madrugada lluviosa), no puedo pegar el ojo porque a Mateo le toca su medecina y temo quedarme dormida; la marmota anda en viaje de negocios por Veracruz, en la tele no pasan cosa buena alguna, yo no se por qué estoy viendo los simpson si ya les perdí el hilo (¿cómo?, ¿qué no son como una telenovela?) y la coca cola ya se me acabó.
Si éste pasaje que les narré no hizo que me ganara su simpatía, entonces nada de lo que les platique a continuación lo hará, porque todo, todo, todo (sí, como la añeja rola que ¿cantaba? Daniela Romo) es deprimente
Hace exactamente un mes que me mudé y... lo siento, no puedo dejar de mencionar el tema.
Aún no conozco a mis vecinos y creo que ellos no tienen la menor intención de conocerme puesto que en éste tiempo no he recibido a las puertas de mi casa, la gringuísima "cestita de bienvenida" que se entrega en toda colonia que se respete, a los nuevos vecinos.
Ni hablar.
¿Se acuerdan del gato de basurero que rondaba por aquí? Lo sigue haciendo, así que pensé que no era de Dios andar insultando animalitos sin nombre, por tal motivo, le puse "Bony", mínimo para que mis maldiciones tuvieran, ejem, un poco de sustancia.
PERO no todo es malo, ven? Ya me puedo bañar con agua caliente que sale de la regadera, ya cocino algo más que huevitos cocidos, la señal de la interné es más o menos decente y porrrrr supuesto, ya tengo a mi piratero de confianza.
Aunque algo que me ha hecho llorar de rabia, frustración y demás han sido las reputs arañas; aprovecahando que no pueden leerme, les contaré que son lo peor que me ha pasado en la vida. Sí, sí, sí...al diablo con los dramas del pasado, las arañas han hecho de mi una piltrafa histérica y han hecho mi casa como se les da su arácnida gana. ¿Spiderman?...jajajaja!!!....
Bueno, ya es hora de la medicina.
Hasta al rato.

lunes, 21 de junio de 2010

El '98.

Hace chingos de años, en el noventa y ocho precisamente, nació en mi LA NOSTALGIA.
Y querrán saber, oh amados menos cinco lectores, qué carajos es; LA NOSTALGIA, ¿no?
Bien.
Pues nada, que la nostalgia es un sentimiento que se ancla como chicle en el zapato, igual de absurdo, igual de molesto. La nostalgia es y será un arma de doble filo para aquellos que son románticos o prácticos. Será lo que te sobra de comida en el refri, que por ninguna circunstancia quieres comer, pero que te es imposible tirar a la basura.
En mi, tal ...mmmm... cosa, es una constante visita; es una perrrrrpetua afirmación de quién no soy y de por qué soy como soy. Bastante ridículo, ¿verdad?
Sí, pero yo hablaba del '98... ése fue el último año en el que cursé la prepa. El año en el que mi padre entró a trabajar a "Reclusorios". El año en el que tuvimos por primera vez "escolta" y mis viajes a Querétaro fueron decisivos (leanlo bien: decisivos).
Tambien fue el año en el que "me puse de novia" en serio, con un chico alto y guapo, que al final resultó ser de los amores más importantes de mi vida. El año en el que remodelaron mi casa, en el que mojarse bajo la lluvia era igual de importante que saber besar. Y claro, el año en el que se jugó el mundial en Francia... con triunfo de Francia, por supuesto, con gol de Emmanuel Petit. Y el año en el que "...y muevo la colita (uh uh uh uh uuuuuuhhhhh uh!) claro que siiiiiiiiiiiiiiiiiii" de Chancho en piedra hacía de mi soundtrack personal.
Tambien fue el año en el que me hice más amiga de Ale, Karina y "la gusana".
Por eso, a doce años y precisamente con el mundial como testigo, doy gracias a que estás de vuelta en mi vida.
Te quiero mucho, Kary.

lunes, 14 de junio de 2010

La Casa de Usher...o cómo me volví loca por un gato.

Muchos de ustedes han seguido mi desgracia, la de mudarme fuera de ésta, mi amadísima, contaminadísima, apestosísima, cagadísima Ciudat de México.
A varios ha extrañado que, de ser una auténtica amante de los gatos, de pronto he pasado a tomarles ojeriza, a declararlos mis enemigos naturales y sobre todo, a iniciar una cruzada en contra de todo felino doméstico que ose poner sus patitas en mi jardín (Y EN MI BOTE DE BASURA)
Nada, que estoy completemente desequilibrada por el asunto de mi mudanza y la locura, compañeros, creanme que no tiene nada de poética.
Apenas tengo una semana viviendo en una casota, no es presunción. La alucino por exactamente, su tamaño. Pero al márgen de eso, la alucino porque no es NADA funcional. Le falta ésto, le sobra aquello, no me permite moverme con comodidad y el desorden habitual en mi ya se ha convertido en un suceso alarmante, puesto que ahora es descomunal y no se limita a un sillón o dos, sino a toda la estancia.
Y y y y... pus en un nada bonito acceso de locura, rompí precisamente el vidrio enterito de la cocina.
Si antes le tenía inquina al gato que abusaba de mi basurero, ahora le tengo ¡PAVOR! puesto que en cualquier momento puede ingresar a la casa y hacerla como su rechingada gana le de.
Y es que no, no es siquiera bonito, pachonchis, lindo...noooooooooooo, es realmente un vil gato de basurero.
Pero güeno, con Mundial, pan y circo nos la llevaremos hasta que dentro de dos años pueda decirles a todos ustedes: "Ay miren, los invito a cenar huevito cocido a mi casa"
O sea!

viernes, 4 de junio de 2010

DANA EN BELLAS ARTES (mientras su hijo berrea en una guardería apestosa, perdida en la inmensidad del Edomex)

Sublime y surrealista ha sido el día de hoy, pues yo, como muchas madres adolescentes tengo derecho a diversiones, ¿no?
La verdad es que mis suposiciones son bastante erróneas pues sabemos de antemano que hace casi quince ayeres que dejé de ser adolescente y que por supuesto no tengo derecho a diversiones, sino a andar buscando trabajo para mantener a una criatura hermosa (o al menos, para cumplirle sus caprichitos) y por ende, he actuado irresponsablemente al acudir a Bellas Artes a nutrir mi espiritu contemplando a René Magritte.
Pero es que la idea de tener tiempo propio fue tan seductora, tan dulce e inquietante para mi deleite que no pude decir "nel".
Y corrí, rauda y veloz hacia mi meta, al fin que la suerte ya estaba echada y ¿quien soy yo, vil juguete del destino, para desobeder al sino?

La exposición es excelsa y bastante entretenida; de los aspectos técnicos obviaré ante el temor de decir pifias, pero lo que dejó en mi es una nueva perspectiva ante la premisa de: "nada es lo que parece".
La belleza de una piedra bajo una nube, el rostro cubierto de un hombre, cualquier hombre, por una manzana verde y jugosa; el curvilíneo cuerpo de una mujer plasmado en una botella me hacen preguntar a qué le supo tal bebestible al maestro Magritte.
Y, la obra que me dejó sin palabras fue: "El mundo invisible".
Tal vez a algunos el contemplar una piedra que a su vez contempla el mar, no será cosa de gusto o de exhaltación, pero a nadie deja indiferente "El hada ignorante" y creanme, creanme de verdad, que algo, algo les moverá en las entrañas colesterosas suyas.
Ya, me rindo. Mi mundo real me jala de la manga diciendo que el viaje ha terminado y que por hoy, ya estuvo bueno de andar perdiendo el tiempo ajeno.

miércoles, 26 de mayo de 2010

¿Bicentenario?...¿de qué o qué?

Ahora está muy de moda eso del Bicentenario.
Que si el edificio del Bicentenario, que si la línea del metro del ídem...bueno, ¡hasta los calzones del Bicentenario ya mercan en el suburbano, a precio de tianguis y con la carita adocenada de Marcelus Ebradus!
Pero ¿qué carajos es todo ésto? pregúntome a solas. Es muy cínico de parte de los que sufrimos éste país, el celebrar fechas que ni son las reales ni nada de nada.
Para empezar, la independencia que tanto nos gusta festejar con pulque, regguetón y chicas buena onda no se celebra el 15 de septiembre, sino el 27 de ese mesmo mes. Y ni hablar de la Revolución.
Entonces por qué nos prestamos al borlote, por qué seguimos la corriente y por qué no entendemos que a 200 años de aquellas "smash downs" de "Inditos vs gachupines" aún hay gente que se siente de un bando o del otro y lleva tales arengas hasta la salida de la cantina. ¿No me creen?, les platico:
El lunes fui al doctor. Estaba esperando a que el Radiólogo saliera de su cubil para que me diera una explicación. Lo esperé con furia primero, con espanto después (pero de eso les platicaré luego) A la sala de nervios llegó un señor de pelo largo, tez cobriza, morral peruano y cotorina. Dió mil vueltas, preguntó a la enfermera mil cosas, miró mil veces a los lados buscando "algo" y contó en mil ocasiones que venía de Chiapas y que le dolía el brazo y que era guía turístico de Lagos de Montebello. Que cuando quisieran aquellos que quisieron escuchar, que preguntaran a la entrada, en la caseta específicamente, por el señor José, que dijeramos que somos family y listo, entramos a dicho parque al precio de ...$30 varos, ¡cómo no!
Acto seguido, llegó una señora que parecía pajarraco, no sólo por su tamaño, volumen corporal y altos decibeles, sino por su actitud avizora, nerviosa y harto chachalacosa.
Saludó y a todos nos dio explicaciones de por qué se encontraba ahí y que sus papeles y ...
Hasta ahí todo iba normal, ¿no?, yo ni pelaba a Mr. LagosMontebellosos ni a Mrs. Pajarraca...hasta que aquel par comenzó a interactuar...¡Oh Dios!...
Ella, con afán periodístico comenzó a preguntarle a Él el motivo de su estancia ahí.
Él respondió lo que ya platiqué.
Ella le dijo: "Tú no eres de aquí, ¿verdad?"
Él replicó: "No, pero ¿tú cómo sabes?"
Ella adujo: "Por tu acento. ¿De dónde eres?"
Él contestó: "Soy de Chiapas"
Y Pajarruca, emocionadísima y al borde del paroxismo le dijo: "¡YO TAMBIEN, YO TAMBIEN!"
Y Él, con desdén le dijo: "Claro que no"....¡zork!
Y ahí se armó la gorda.
Todos en la sala de espera fuimos testigos de cómo la señora y el señor se enfrascaron en una pelea en la que al final ella le dijo "indito" y el señor, dirigiéndose desgraciadamente a mi comentó: "mire señorita, mejor ni le respondo a la señora que se cree colonizadora, es una desgracia que a estas alturas de la vida, tenga que lidiar con gente como ésta."
Diablos, a mi la neta es que ni me importaba su pleito, pero ps si, el don si que tiene razón. Y cuando vaya a "Chapas", sí voy a preguntar por Don José.

lunes, 24 de mayo de 2010

MUNDITO JURIDICO

Hace diez años cursé la carrera de Derecho, en la FES Aragón.
Bueno, siendo específica: hace diez años iba en el tercer semestre de la carrera y, por aquellos tiempos, conocí al abogado que es MI parámetro de lo que los licenciados en Dº deben ser.
El ahora Doctor Ares Nahim Mejía Alcántara era en aquella época mi profesor de Derecho Constitucional; contando con 26 años transmitía con fe y devoción su conocimiento aún fresco a quien se dejara seducir por su amplio criterio e ideas novedosas de lo que debía ser el estudio de la Constitución pero, sobre todo, de lo que se esperaba de nosotros estudiantes.
Huelga decir que vivía "un poco" alienada por él, ¡vamos, que yo tenía 19 años! y como dije antes, para mi se convirtió en un ideal en todos los aspectos, tracendiendo el personal por encima del jurídico. Obviaré que nunca pasé de suspirar por él encuanto corredor, sala de maestros, estacionamiento o equis instalación de la universidad me lo topé "accidentalmente", of course. Mi amiga Carmen Pimentel es testigo -y víctima- de aquella infatuation escolar y cada que lo recordamos reimos, una gustosa y la otra por mero compromiso, pero siempre con un "¡ahhh!" nostálgico al final por aquellos tiempos.

PERO ESO NO ES LO QUE QUIERO CONTARLES...
Lo que sucede es que leyendo el periódico del día de hoy, me topé con tres noticias que parecieran no tener nada en común, pero que en realidad lo tienen y ¡muy!.
  • Por un lado, la más escandalosa de todas: que la H.H.H. PGR dijo que calladita se veía más bonita y que eso de procurar justicia pues nomás no es lo suyo, ¿verdad?, que ella prefiere sentarse a ver sus comedias y ahí háganse bolas en el caso de Diego Fernandez de Cevallos; que si carga o no los peregrinos esa no será más su bronca, añadiendo, como Doña Márgara Francisca, su cura en salud de "con todo respeto y a petición de parte".
  • Por otro lado, hambrunohuelguistas del SME pidieron a "Don Norby" en la misa del domingo que les ayude a llegar a los corazones siempre pétreos de la clase política, haciendo uso de sus clases de encanto y persuasión que enseñan hoy en día en los seminarios. Según "La Jornada", el buen "Chato" se comprometió a interceder en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ¡wow, eso si es PODER!
  • PERO POR OTRÍSIMO LADO, hay un pleito bien sabroso entre la Armada y el Ejército mecsicanou por un avión. Sí hombre, el poder ejecutivo decomisa un jet a la armada, dice "La Jornada" again, que para evitar envidias...¡envidias!...¡háganme el rechingado favor de siempre, -5 lectores! Lo malo es que el Congreso de la Unión ya había dado su bendición para tal compra y llega Felipín y les da baje con la nave.

¿Que qué tienen en común esas noticias? Bueno, una cosa tan obsoleta como los antiguos "flopys" de mi época estudiantil: La descomposición de los tres poderes de la unión y la violación a la división de tales poderes en aras de otros aún más potentes. La intervención directa de la iglesia católica en la vida política de Mexiquito y la confirmación, queridos -5 lectores, de que ya valimos madres...como siempre.

Bueno, los dejo, me voy a ver el insufrible partido Inglaterra vs México...ra ra ra!!!

sábado, 22 de mayo de 2010

CAMBIOS

Doce días han pasado desde mi último reporte desde el frente y aún no termino de recuperarme de aquel fatídico diez de mayo. Antes de ser mamá, ya lo saben, la vida era diferente. Yo era diferente. Nunca he sido muy amiga de los cambios; éstos me producen una sensación nada agradable en toda mi espina dorsal. Lo más seguro es que se trate de traumas de la niñez y a estas alturas del partido, es de franca hueva hallar una explicación científica. Pero así es. Le temo a los cambios.
Ahora, mi pequeño mundo se cimbra ante nuevas vueltas de tuerca: me mudo de casa y Mateo entra a la escuela...sniff.
Ayer fuimos a inscribir a Mateo a "Mi casita". Mientras la miss Sofía me explicaba cómo es que los niños berrean la primer semana de clases, mis ojitos se humedecían ante lo inminente: que el Matius estará lejos de mi y yo debo empezar a vivir de nuevo mi vida...aunque sea por 6 horas.
Rayos, secretamente añoraba el hecho de volver al mundo laboral, el relajo del messenger y ocuparme un poco más de mi; pero obviamente que no estoy preparada para ésto. Claro, se que es lo mejor, que es bueno, que seremos felices y shalalá.
Pero siento ya dolor.

jueves, 13 de mayo de 2010

pOSt muuuuy viejito...Pero que vale la pena leer por...uhmmm.. no me preguntes, sólo soy una chica!

Cada que me sucede algo reelevate en mi acontecer cotidiano (y con reelevante me refiero a cosas como: tomar un viaje en el bus, ir al doctor, cenar con mis papás, viajar en metro, ¡hasta ir al super sola!) pienso en compartirlo aquí mismo, en mi blog.

Pero pasa que, por una razón u otra, no hay internet, tengo cosas que hacer o simplemente mi diablillo (¿diablillo?, ¡si es un auténtico hijo de la ching*d*!) interior me aconseja que tal vez todos ustedes estarían más complacidos en hacer cualquier otra cosa que leer éstas absurdas tribulaciones que ocupan mi mente; y ya por eso se me olvidan o las archivo en el "cajón del desperdicio pa los puercos".

Hoy una cajera me hizo llorar. No se qué rayos nos pasa que tratamos de vengar nuestra situación personal con quien se nos ponga enfrente. Ha pasado el tiempo donde ser amable y ayudar aunque sea un poco al prójimo era algo común.

Miren, yo DANA JUAREZ SALAZAR, trato de ser amable con la vecina, aunque sea una histérica que pone su música bandosa a todo lo que da y golpea y grita sin cesar a sus tres hijitos. Soy linda y tengo gestos amables con ciertos familiares que cada que se les presenta la oportunidad, se portan ojetes con mi mamá. Le sonrío y le doy dulces al chamaquito que se mazapaneo al Mats en el parque, pensando que si lo hizo, es porque nadie le dedica tiempo.

Cuando trabajaba, soborné "delicadamente" a cientos de burócratas para que, aunque fuera con un juguito, o una coca, o un chocolate se les hiciera menos pesado hacer su trabajo y no entorpecieran el mío. Le doy besito de "buenos días" a la Marmota, aunque haya puesto un tren en mi oreja con sus ronquidos.

O sea que mala onda no me porto.

Por eso es que hoy no puedo entender la actitud de la ESTUPIDA cajera que cobró mis análisis de sangre. ¡Carajo!, ¿qué le costaba guardarme el cambio y entregarmelo al término de mi cita?

Ahhhh noooooooooo, la muy bestia pretendió que cambiara un billetito de $500 bolas, a las 06:12 a.m. porque ella simplemente -¡ups!- no tenía cambio. Y de nada sirvió hacer ayuno de 12 horas, con la consecuencia de mi hiperglucemia, de nada sirvió desvelar a Mateo, a la marmota, a mis papás...

De verdad que qué triste ha de ser su vida si ella necesita realizar villanadas para sentirse mejor consigo misma

lunes, 10 de mayo de 2010

Bloody mother´s day.

Hoy celebramos a aquellas mujeres que, por angas o mangas, nos hemos convertido en mamás.

El día empezó con mariachi y porras a las progenitoras del vecindario, mientras que en casa gato, una mujer estiraba su sensual brazo en un afán por estrangular a su ronquidoso marido y un chamaquito chillaba por su "titi". Nada bueno se auguraba en esos momentos.
Después de la tradicional "bolita a mamá" que organizaron las marmotas, el siguiente paso fue el acicalamiento express y ¡a desayunar!...pero, ¿a quien, vive Dios, se le ocurre salir a ingerir alimentos en este heráldico día?. Obvio, todo lleno y con las tripas chillando, nos tuvimos que conformar con los mac tríos, cuyo promisorio nombre nomás no pudo satisfacer placer alguno. Así que, una vez más, con la resignación plantada como sonrisa en la cara, nos dirigimos a "escoger el regalo de mamá". Está por demás decir que a éstas alturas del partido, las marmotas salieron despedidasd al espacio sideral. Lo siento, demasiada frustración.
Quiero pensar que la vida no es perfecta y que eso está bien. Que es mentira lo de la casita de muñecas y que jugar al "papá y a la mamá" nomás no está padre. Porque de no hacerlo, de no vivir con un "no es como en las películas " constante, la vida en verdad es muy amarga. La realidad es muy amarga.
Cuando se tienen expectativas y nada más, el camino se hace lento, torturoso. Los sueños antes de despertar son lo más cercano a un modo de vivir estructurado y no busco culpables, de veras.
Pero en mi visión no encaja el día de las madres como algo místico, envuelto en gasas y algodones, con querubes revolotenado, balanceando inciensos de manzana canela y las notas de Bach de fondo. Porque en mi caso, el día de las jefecitas es el pan de cada día. Es la reafirmación constante y a huevo, de que soy mamá. Y ya para terminar esté "rondó", no me gusta festejar ni que me festejen. Lo detesto, en verdad. Cursi, anormal y bastante frustrante es ver a las madres perfectas con sus hijos y maridos perfectos, dando vueltas como si flotaran en vez de caminar, llenando el espacio (y robando oxígeno, además) de maternosa buena vibra.
Me queda claro que la mamá con el peinado y luk perfecto es resultado de buenas nanas, el chofer, la billetera del maridito y un "no me arrugues el vestido, m´jito".
Y pues yo, la neta es que traigo mi veintiúnico pantalón "bueno", lleno de algo parecido a un chicloso y mugre de zapato.

jueves, 6 de mayo de 2010

Leyendo "KAFKA EN LA ORILLA"

Lo leo saboreando las palabras; letra por letra.
El sabor que deja en mis neuronas tiene un dejo a pescado - a caballa, específicamente-.
Aún no llego al final, me falta tinta por recorrer. Pero no quiero.
Me rehúso a terminar con ésta agonía, no quiero saber lo que sucederá porque lo que siento en éste instante, no lo sentiré otra vez. Ni en ésta vida ni en otra.
Porque ésto es lo más cercano a tener un enamoramiento y ya todos sabemos cómo acaban éstas cosas. Sentimientos violentados por una corriente trasatlántica, sepultados bajo hojarasca de bestialidad.
Por eso no lo terminaré y lo sumaré a mi lista de promesas a olvidar. Y en ésta lucha indómita entre mi conciencia y mi salud mental, dejaré que el destino decida -¿no me canso?- otra vez por mi.
Hasta que el calor y la demasiada realidad me topen de frente, con él en la mano y una pistola en la otra y hurte, sí, hurte, horas al día para asestarle el golpe final.
Necesitaré un boleto a Tokio para poder terminarlo, porque sé que ya no podré vivir sin los rollos de espinaca y atún; sin la lluvia de caballas y sardínas y sin ese poema que es Kafka a la orilla del mar...
Y mi pobre Gatería pagará las consecuencias.

martes, 4 de mayo de 2010

Contra reloj...

El aviso de batería indica que tenía 13 minutos disponibles para teclear gatejadas o si no, iba a valer madres porque ella, como la señora que cobra los impuestos, no perdona; así que si era posible, me apurara a escribir lo que tenía que escribir pues ella le importa poco que pierda información. Total, ella cumplió con avisar y listo.
En la sala, los ronquidos de la Marmota se escuchan por todo el edificio y eso, a mis vecinos, ya no les hace gracia. Prueba de ello, encontrar restos de trucha en el cajón de estacionamiento, miradas hostíles a la hora del intercambio matutino o simplemente, un "ya cállate" a grito pelado desde el 303.
La lap bufa, recordándome que estoy a un tris de desaparecer para siempre éstas breves que harán historia. Se complace en recordarme que no tengo tema interesante que platicar y que, al paso que voy, sería mejor cerrar "La Gatería" forever.
Que no hay público para las cuitas de una mujer que no se siente mujer, ni niña, ni adolescente y que esa falta de identidad con la edad la hace presa de múltiples desvaríos. Pero que ni por mucho, son desvaríos graciosos.
Y ahora se me ocurre empezar a compadecerme, justo cuando la pila está a punto de fenecer.
¿Estoy mal?, debería dedicarme a buscar recetas de pan de ajo en internet, en lugar de tratar de conquistar un lugar en sus corazones?
¿Debería hacer la colada, limpiar las huellas de carbono e irme a dormir?
Porque hoy si de plano, la pila se me acaba.
Ra...

viernes, 30 de abril de 2010

DIA DEL NIÑO

¿A qué edad dejas de ser niño?
He visto gente en la calle (en la misma donde llueven gatos y perros) que a decir de su aspecto, parecen quedados en la niñez (ojo, que no en el forovereo, como acá su servilleta, eh? -guiño de ojo-.) y que efectivamente, viven en un mundo de caramelo. Envidia, a veces.
A título personal, nunca he renegado de la parte (o totalidad) que le he mercado a la niñez para seguir usufructuando en la edad adulta y es por eso que las líneas superiores son puuuuura vacilada.
Empecemos:
Recuerdo con oso todos los días del niño. No hubo alguno en el que no sufriera algún percance, ya fuera físico o emocional. Estoy convencida (debido a mi retorcido narcismo) que nadie sufrió tantas contrariedades en la niñez como yo. Y lo pruebo:
Tenía seis años, iba en primero de primaria, en una escuela bien pedorra cerca de "El Sol de México", en la colonia San Rafael. Ese día, salimos de la escuela con rumbo al ilustrísimo Cine Opera, que en esa época aún exhibia funciones para niños; formados, me tocó como compañera a una niña con la que me llevaba equis: Yésica (sí, con ye). Y bueno, papalotera como siempre he sido, la mentada Yésica y yo terminamos -inexplicablemente- separadas del grupo, en la bola con los alumnos de sexto (que eran los más gandallas) y... en gayola, o sea, hasta arriba.
En el susto por imaginarme viviendo allí para siempre, trepeme a la butaca, con la certeza de que mi 1.33 mts me ayudaría para visualizar y encontrar a mi grupo y de paso, rescatarnos y llevarnos sanas y salvas con la miss.
No solo no vi un carajo, sino que además, en la prisa y con el alboroto causado por los chavitos, mi pie quedó atorado en el hueco del respaldo/asiento y ¡zaz!, mi trastorno generalizado de ansiedad se manifestó al hacerme perder el juicio y obligarme a dejar mi zapato en aras de llegar con vida a la escuela.
Despeinada y sin un zapato, al fin pude salir de aquella pesadilla, sólo para comprobar que la dotación de regalos había sido magnífica pero, y eso es lo más triste, como la miss no me vió (y ni siquiera se percató de mi ausencia) pues ya no me tocó, ¿verdad?, ay éstas muchachas.
Así que: despeinada, sin un zapato y SIN REGALOS, mi madré recogió a su hija.
Y ustedes imaginen el resto.
FELIZ DIA DEL NIÑO.

lunes, 26 de abril de 2010

¿Qué le pasa al mundo que están lloviendo gatos y perros?

Pues así es.
El mundo tal como lo conocemos cambia a cada instante; tú cambias a cada instante. Lo que era importante para ti en un segundo, ya no lo es más.
Así de fácil, todo cambia y con tu cambio, orillas a que el de al lado, cambie también.
Siguiendo ese tenor, ¿te has puesto a pensar en lo irresponsable que es cambiar?; imagina que de repente cambias y por ende, causas cambios en la gente a tu alrededor. Cambios que a su vez, harán cambiar y cambiar a ene cantidad de pipol que como tú, no tienen ni piut idea de por qué rayos la cosa cambió.
Oh Dios!, ¡tanto café, tanto desvelo, tanto maldito Satoshi Kitamura...!
Pero todo cambia.
Arghhhhh....

viernes, 23 de abril de 2010

Vagando por la ciudad como perrito sin cadena (pero aclaro que a mi no me laten los perros sino los gatos, por algo ésto se llama "La Gatería", no?)

Así es.
El día de hoy la naturaleza, el horóscopo, el oráculo y la agenda de Marmota dispusieron que viniera al doctor. ¡Al Doctor!... ¡háganme el re chingado favor!, como si yo necesitara venir al doctor debido a una INMENSA bola de algo que tengo en la pata izquierda, dolorcitos chistosos en donde, según los tratados de anatomía del siglo XIX, se supone que tengo los riñones; un dolor bastante agudo y constante en la parte conocida cosméticamente como la "zona T" que me hace sospechar que sufro de violencia doméstica combinada con franca narcolepsia y episodios de catatonia, pues no me explico cómo rayos me duele algo sin razón aparente y (oh sí, aún hay más -dios te bendiga, Raúl Velasco-.) congestión nasal (ay, pero si mi nariz es diminuta).
Así que aquí estoy, muy quietecita, esperando a que llegue mi turno con el dotor, escuchando musiquita, escribiendo tontejadas para que ustedes se rían y yo sienta bonito y tomando café de una maquinita muy cura.
Y después de mi cita, ¿qué vendrá? Mateo está de visita con su abuelita (y no, no le llevó bollos y miel) Marmota trabaja, como el buen marido que es y yo tengo la posibilidad de hacer ALGO... pero no atino bien qué hacer.

Ahhhhh!!, me entra ansiedad de concurso chafa: debo escoger algo muy bueno en un "lapso de tiempo" relativamente corto.

Pero ayer compré "Paris, te amo" a $46 pesos en Mits up...¿me vieron la cara?

jueves, 22 de abril de 2010

Ecologia Chabacana

Hola!! (aaaaños de formación con mis profesores de español... si leyeran mi gramática, seguro que les daría el patatús - sí, también por eso-.)
Pues llegó el multi mentadísimo "Día de la Tierra" (en adelante, Día T).
¿Cual es la finalidad de conmemorar o celebrar el Día T? A nivel miqui maus, que es el nivel en el que percibo la mayoría de las cosas, opino que ha sido inventado para calmar a varias conciencias que no tienen la mínima intención de cambiar. O, dicho de otra manera: Pan y Circo a nivel mundial.
No me voy a hacer el hígado frappé nomás de platicar todas las barbajanadas que se comenten (y cometemos) en perjuicio del planeta, ni tampoco diré que con tirar la basura en su lugar, o consumiendo productos "enviroment friendly" o vistiendo sacos de papa hechos de yute, en lugar de mi carísima blusa de Massimo hecha con fibras sintéticas, ya estoy a salvo de morir gustosa con todos ustedes en ésta bola de nata que es la Tierra.
Tampoco me daré golpes de pecho y condenaré masivamente a los "poderosos", por estar llevandonos literalmente al carajo; no renegaré de todas las acciones de organismos ecologistas, arguyendo que no sirven mas que para contaminar de muy diversas formas y para malgastar dinero. De veras que callaré mi bocota y no gritaré en la calle que si de veritas queremos mejorar el lugar en el que vivimos, habremos de convertirnos en comunistas o socialistas (da igual, da igual), me daré "manazos" en las manos (¿en donde más?) para no tipear consignas en contra de todo la humanidad, por crear lugares comunes en lugar de tener sentido común; tampoco me burlaré de los niñitos que hoy saldrán disfrazados de árboles, pajaritos, plantas, ballenas...etc, con banderitas y caritas de sueño, gritando: "Salvemos al planeta" mientras sus misses sonríen con benevolencia.
Y aún más: me sumaré al apagón masivo a las ocho treinta pe eme, con el fin de crear conciencia en los que, evidenetemente, no tienen, pero que yo no señalaré con el dedito, que finalmente mi madre me ha dicho que eso es de mala educación.
De verdad que yo quiero mucho a mi planeta y en lo que quepa, haré lo posible para que él no tenga queja de mi.
Pero sinceramente, ya estoy sumandome a la lista de nuevos colonizadores de la constelación de Orión, por que sinceramente, estoy convencida de que ya valimos madres, por muchos Dias T que se celebren. (Que aquí entre nos, no creo que sean muchos).
Lo siento.

sábado, 10 de abril de 2010

"VUELA VUELA", O "Lo que un día sin marmotas puede hacer en la vida de una mujer cuasi treintona"

Hoy anduve pegándole al forevereo. Y la neta es que mi desván está bien poblado de harta cosa -que dice Lalove: "sobrepasan los límites del kistch"-. Pero ps normal.
De las mejores épocas de mi vida, ni la primaria, ni la secundaria, ni la prepa se incluyen. De la Uni, lo único bueno que me dejó es un corazón roto y pegado "ene" cantidad de veces, tres buenos amigos (sí Pollo, sí estás incluído), ocho conocidos y 450 "¿quien era ese (a) wey?". Entonces, ¿cuales son esas "mejores épocas"? Puedo decir, a riesgo de sonar alienada, que las mejores épocas fueron las vacaciones de verano de 1993 a 1996. La razón: las viví y gocé en Querétaro, con mi prima Lluvia, mi noviecito Ovidio y su pandillita llamada "Los Chacales". Guauuuu!
Por aquel entonces, el rock aún no se había instalado del todo en mi CPU, me gustaban los básicos: Caifanes, La Maldita, La Lupita, Tacvbitos, y Bon y los enemigos del Silencio; lo que sí me pegaba y cañón -oh dios- eran... Magneto, Fey, Mónica Naranjo, El general..jijiji, Caló...jojojo...alguien llamado Sergio Blass (con su inimitable cover "siempre tiamare")Martha Sanchez...The Sacados y Gloria Trevi. ¡Sacrilégio!.
Piedad...tenía 13 años.
Luego vinieron terremotos (como los que predice Kno), hambruna, guerras y el mundo para mi cambió: alguien hirió mis sentimientos haciendo que me avergonzara de mi pasado musical y todo esto cayó sepultado al ritmo de: "...ice cream, taste good if you eat it soon..." (o sea, sólo por que es P.F) para NUNCA más volver a aparecer en público.
Hasta hoy.

...golpeando con las palmas, suena tremendo..."

Propongo el "Vive Popero 90´s"

sábado, 3 de abril de 2010

GLORIOSO SABADO

De chica, mis mayores placeres eran: tomar helado en "La especial de París", los scouts, las ferias del libro y de barrio, respectivamente e ir al Parque Hundido.
Hoy quise compartir tal placer con el buen Matius y la abnegada Marmota y debo decir que no estuvo tan mal, salvo el haber sufrido un asalto en despoblado por parte de la Congregación Nacional de Vendedores del Parque Hundido (SPSNC, por sus siglas en inglés) al pretender (y lograr) que pagaramos las colegiaturas de sus hijos de todo un año con serios aumentos a los típicos helados "de bolita" de a diez varos por piocha; o que decir de los colosales chicharrones de $25 peso. Pero el colmo del colmete fue que, en un momento berrinchoso de mi querube, nos encajaran un carrito de plástico con rebabas a ¡sesenta pesos! ¡¡o seaaaaa!!
Eso sí, Mateo estuvo muy feliz y todos lo fuimos al imaginar en lo rápido que "caería" al anochecer e ir a su cama (nada más alejado de la realidad...son las 11 de la noche y aún escucho los pasitos de mi hijo rebotando por todos lados).
El caso es que, volviendo a mi y mis añoranzas, el parque está mucho más equipado en los juegos de lo que estaba en mis días de infante. Los juegos de lámina y colores chillones han sido reemplazados por muy modernas y ergonómicas estructuras, lo que hace que los padres palidezcamos de envidia al recordar la época en la que sólo habia una resbaladilla, tres columpios y un cajón de arena apestosa. Y yo lo viiiiiii, yo lo vi. Observé a los padres trepandose discretamente en los juegos, mientras sus hijitos los veían entre extrañados y avergonzados.
El Matiu no. Él de plano pudo pasar de dicho trance por el simple hecho de que su madre está...

jueves, 25 de marzo de 2010

Pinches Jueves...

Los jueves en Casa Gato son una delicia (o lo fueron, hasta el presente).
Marmota sale de viaje, Mateo se cansa rápido y yo puedo disponer de tres maravillosas horas libres, las cuales eran empleadas en: labor doméstica express y enajenación con "Bienes Raíces" de Canal 11.
Pero hoy no.
Para empezar: Mateo no se dormía, Marmota llegó temprano y pa variar, nos enojamos.
Así que, como buena berrinchuda, me encerré en mi alcoba, me puse a actualizar banalidades en mi fb y como el berrinche aun no se me quita, aquí sigo reportando desde el frente.
Para mi desgracia, sólo hay una tele y ya se imaginarán quien la está ocupando.
Es insoportable pensar que no tengo la capacidad de valemadrismo de cierta gente y que por eso estoy aquí escribiendo necedades en lugar de estar c0nviviendo con Marmota y en el mejor de los casos, viendo mi programa favorito.
Se ve que el diablo no consigue taxi.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Chale!

Hace cosa de dos años, comentaba alegremente acerca de una noticia, pues, jocosa e intimista.
El pleito de Banamets vs....(de pie, por favor) JUAN SILVA MEZA.
La cosa es que dicho banquito le debía una cantidad astronémica, algo así como: 289 mil melones de pesos.
Y pues, aquel que conozca de leyes sabrá lo que ocurrió y los que no, he de decirles que la supremosísima corte de yostis falló. Si, falló, erró, culebreó, metió la pata, le torció a la puerca el rabo, se le hicieron quesito los huevitos porque falló a favor de Banamets.....ahhhhhhhh (suspiro).
Por eso vendo ropita y ya no le hago a eso.

Aquí nomás pensando...

A ver, hace poco inició una ligera controversia acerca del por qué me oponía a que se celebrase un concierto llamado: "Vive Grupero". Dicho concierto está por llevarse a cabo en el Foro Sol, tal día de éste mismísimo año y desde mi muy respetable punto de vista, la idea no acaba por emocionarme.
A mi, a mi, a mi no me late en lo más mínimo dicho genero; no, tampoco sufro de amnesia cuando en las bodas cambian el insuperable órgano melódico de Juan Torres por la música en comento y me paro a bailar. O sea, no,
La música grupera es buena o mala según a quien le guste el género pero, como ya dije, a mi no me late andar de chunta chunta por la vida, porque, qué caso tiene andar escuchando a un fulano que canta barrabasadas tipo: "huuuuuuuumíllate, pideme perdón...etc" con una voz tan aguardentosa que es la envidia de cualquier "agüero" de la Bondojo (con TODO respeto a los "agüeros" y/o a los Bondojianos.)
Y bueno, como dije: desde mi muuuuuy respetable (y cuestionable, como el de TODOS) punto de vista, creo que el género está sobrevaluado, sobresaturado y ridículamente inflado y no conforme con eso, aparte de tener secuestrada (síiiiiii, dije eso) la ciudá con sus acordes, pretenden llenar (y lo harán, de eso no hay duda) un recinto TAN chilango y rockero (que no ruquero) como es el Foro Sol.
Si, ya lo se, el varo, la borregada, cualquier género está corrompido ya, bla bla bla...
Sí, si, si, la libertad de expresión, de género, de ideas, o sea, no me malinterpreten. Sólo me quejo de los "avances" de dicha industria por encima de un género que, corrupto o no, malo o bueno, se ha partido la madrecita santa en ganarse un lugar, un espacio para todo aquel que guste de matear (no, pibe, no es contra vos) y encuerarse al ritmo de : "hey, hey, mama, said the way you move. Gonna make you sweat, gonna make you groove..."
Pero bueno, ahí me platican como les fue.

domingo, 21 de febrero de 2010

Allan Rickman y yo.

"Sí, me gustan los "maduritos""... jajajajaja, esa es una frase tan estupenda para iniciar una conversación.
Cada que veo "Sentido y Sensibilidad" ó "Senzatez y sentimiento" (nunca he podido averiguar cual es su verdadero nombre), me pierdo en los enigmáticos ojos de Allan Rickman aunque mi subconciente me recuerde que, ese mismo "muchachón", es el hórrido profesor Esneip.
Pero bueno.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Aventuras en pañales.

Estoy cansada, sabes?
Hoy llevé a Matiu al pediatra, a sus vacunas. Lloró y lloró, pateó, mordió y maldijo todo lo que pudo a su suerte. Ps ya como pudo, se rehízo y aceptó de pésima gana una paleta.
Y como buena madre abnegada, lo llevé de paseo para que se le olvidara el mal rato. ¿A dónde?, pues a Universum, cómo no!. Paradisiáco lugar para cualquier niño de dos años con alta concentación de energía malsana.
Ok, me ahorro la pena de platicarles lo que sucedió por allá, sólo comento que la criatura angelical se divirtió mucho correteando alrededor de una representación a escala de un "quantum".
Oh...

domingo, 10 de enero de 2010

El Matiu.

Mucho me sorprende mi hijo y los bebés en general.
Fuera de las ondas babyeinstenianas y montessorianas, siento que: efectivamente, para ser padre no se estudia, pero hay niveles, eh?
Recuerdo que cada vez que sentía una injusticia cometida hacia mi persona por "equis", inmediatamente registraba el hecho en mi cabezita (perdónen la ortografía, es que zezeo de vez en cuando) y juraba y perjuraba por la máxima deidad existente que jamás de los jamases repetiría tal pifia con mis hijitos.
Peeeeeeeeero años de información inútil y sendas dosis televisivas hicieron que mis propósitos se fueran derechito a la goma y ahora, al no saber qué hacer con El Matiu, el temor de cagarla en su educación pesa peor que una pipilosa losa.
Y pues si. Mala hora elegí para hacerle caso a mis papás, a los suegritos, a la tía, a la prima, a la amiga, a la comadre, al compadre y a quienes ustedes más gusten y manden; sus enseñanzas invaluables han hecho que mi cabeza y mi sentido común estén embotados.
Ahora sólo ruego porque Mateo no me eche en cara nunca el apestoso hecho de haberlo llevado al Papalote, de arrastrarlo a la Feria del Libro, de comprarle cuentos de Satoshi Kitamura, de saturarlo de Treinta y un minutos, de mojarnos en la lluvia, de atiborrarlo de chocolates, de ponerlo a escuchar a Suede y Stone Roses y obligarlo a que observara tele gringa.
Los niños son tan...misteriosos; cada uno tiene su magia, su chiste.
Y claro, el mío es el más mágico de todos.
El buen Matiu.