sábado, 31 de diciembre de 2016

Adiós 2016

No necesito que el año se acabe para ponerme dramática: lo soy desde 1980.
Y si, dejé de escribir desde hace medio año y ya no le veo sentido explicar por qué. Porque eso ya es agua pasada por el puente; dejemos que el agua nueva y pura llegue e inunde mi corazón. Que me nutra, que me llene y me purifique.
Que todos ustedes encuentren eso que los haga inmensamente felices... tal como yo he encontrado mi camino.
Y mi felicidad.
Feliz año nuevo, queridos menos 5 olvidados lectores de siempre; como las piedras rodando, así nos habremos de encontrar.

P.D. ¡Y ya!