jueves, 10 de junio de 2021

BREAK POINT

 Hoy por la mañana hablaba con mi bestie (que no bestia) Luis Angel, sobre lo paralelo de nuestras vidas.

Él, soltero empedernido, empresario en año sabático y con miras a dar un giro en su vida de manera padrísima, sin ninguna atadura.

Yo, full time mom, godín y con tanto peso encima (literal).

Entre broma y broma, salieron algunos verdadazos que dolieron como golpe de resortera. No lo voy a negar: entre ser una persona soltera con la edad y posición correctas,  y ser una persona con un ex marido y dos hijos -el uno, adolescente y con principio de depresión, la otra, una cabrita sin muchas ganas de ser pastoreada-, ¿quién en su sano juicio elegiría alegremente lo segundo?.

Pero ahí está el detalle.

Yo no elegí tener la posición en la que ahora me encuentro.

No me casé para divorciarme, no me convertí en madre para no poder pasar tiempo con mis hijos y que por consiguiente, se crashearan de manera tan triste por la actual situación mundial, ni tampoco era mi sueño estar luchando por su bienestar sola. Nudo en la garganta...

Y si, estoy demasiado consciente que aunque no elegí tales situaciones, puse de mi parte (o no) para que al final terminara sucediendo la vida de esa forma.

¿Y?

El juicio social cae como una guadaña muy afilada sobre las personas que se quedan lidiando con el problema y justifica y perdona a aquellos que abandonan.

Pero ya basta de seguir cargando con esto.

Ya basta de sobre responsabilizarme por todo. 

Estoy cansada de poner buena cara a todo lo mierdoso que está sucediendo en mi corazón porque honestamente siento que ya llegué al límite de entender mis circunstancias sin quejarme, sin alzar la voz, sin señalar a nadie, sin decir "¡La vida apesta...ya no puedo más!".

No se en qué momento me dejó de parecer comprensible esta pandemia, no sé cuando dejé de poner atención a los detalles de Alo, a las necesidades emocionales de Mateo, a mi cansancio mental y emocional por estar entendiendo, justificando, tragando las lentejas de equis, zeta y ye.

Y el desahogarme y señalar y mentar madres tampoco va a revertir nada de lo que sucede dentro de mi, de mi casa y a mi alrededor.

Solo sirve para darme cuenta que la reciprocidad es solo una palabra compleja en un concurso de deletreo y que no necesariamente aplica en todas las relaciones personales que he cultivado. 

Igual tampoco las supe cultivar.

Igual karma is a bitch.

Todos están demasiado ocupados en sus asuntos y eso está bien. 

He estado para cada persona que me ha requerido en su momento y no me arrepiento de eso; no reniego del amor, cuidados, ternura, amistad que he dado. 

Solo es que quiero fijar un punto de partida también. Alcanzar algo, sentir que poco a poco escucho nuevamente mi voz; darme ese respaldo que le he dado a los demás. ¿Sí lo merezco, no?

Después de todo, si he creído en la gente para que alcance su cenit, si he visto en los demás tantas cualidades sin destapar, si he podido perdonar tantas afrentas de corazón, si he puesto los intereses superiores de las criaturas que viven en mi casa por encima de los míos, si he dejado que mis ilusiones se marchiten por conservar las de alguien más, ¡chingao!, ya es tiempo de dejar de temer y emprender el viaje... nuevamente.

Este es mi punto de partida. Sí, otra vez. Sí, vamos a la carga nuevamente. Sí, sí duele ver la diferencia de distancia y velocidad entre los cambios de vida en una persona soltera y una persona con dos criaturas. 

Pero dolería más haberse quedado en el mismo lugar nuevamente, esperando a que alguien se decida a elegirme con todo y mi casa a cuestas...


This will be an everlasting love
This will be the one I've waited for
This will be the first time anyone has loved me...


Y ESA SERÉ YO.