viernes, 13 de julio de 2012

La que soy en éstos momentos.

Seguramente se está preguntado, querid@ menos un lector, dónde carámbas me encontraba, ¿cierto?
Bueno, no tengo empacho en comentarles que tuve una recaída -muy larga, molesta y estúpida- de la enfermedad silenciosa llamada DEPRESION.
¿Que qué gano con contárselos y deprimirlos aún más? Bueno, seguramente el morbo y la preocupación justificarán mis próximas líneas, así que esa pregunta se quedará sin respuesta.
Así es, queriditos míos, poco antes de las elecciones, durante las mismas y al término de ellas entré en estado automático. Mi formación profesional e intelectual me llevó al colapso endorfinal al no permitirme dejar pasar lo que a las claras, parece ser un episodio más de la tragicomedia mexicana "Vivir en México".
Sip, voté por la izquierda y me sentí muy decepcionada de que no llegara ni a semifinales.
Ahorrémonos comentarios a favor o en contra, digamos que a mis Treinta años, mi mayor preocupación es que mi esfuerzo no sea suficiente para sacar adelante al Matius. Si viviéramos en departamentos japoneses (literal y metafóricamente) tal vez mi preocupación no fuera tanta, sabiéndo que sólo de mi depende un éxito o un fracaso... pero bueno, ya habrá ocasión para hablar de ello, ¡si lo bueno apenas comienza!
Como les decía, ésta "crisis" coincidió con los tiempos electorales, pero también con el término del ciclo escolar del Matius, premiaciones, festejos y despedidas, las cuales -lo saben- me hacen MUY mal.
Si he de serles sincera -y poniéndo chonguitos para que no dejen de leer éste, su blog pacotillero de confianza,- entonces tendrán que saber lo poco tolerante que soy para muchas cosas, entre ellas, los cambios al status quo de mi día a día.
Están a punto de saber que mis pequeñas manías u obsesiones han hecho de mi un guiñapo, pero que gracias a esta "semi estructura" es que no he terminado con una dotación de alcaloides en el torrente sanguíneo.
Así que era de esperarse que llegando las vacaciones, mi Quadrada (¿a quién les recordé?) visión de las cosas encontrara un obstáculo insalvable y por ello, cayera lentamente en la madriguera del Conejo Blanco (Memorándum para mi: Hacer esos autorretratos ¡YA!).
Eso y que el Vextor ya no me hace, caray.
Y por si eso no fuera todo, que el Matius se me larga de vacaciones a MichoacánQuéBelloLugar.
¡Pffff!
Cinco días sin chamaquito... parecía una llamada demasiado placentera que no podía dejar de atender. ¡Mini vacaciones soñadas! ¡Tendría el mundo a mis pies! El tiempo suficiente para hacer todo aquello incluído en mi lista de "Aplazables hasta Octubre" (y que incluye tópicos como: Hacerme una manicure, estar en dos lugares al mismo tiempo, sembrar un libro, escribir un hijo y tener un árbol, etc.)
Pero la delicia en manos de un animalito de la creación como yo no es igual que para los demás.
Y ¿por qué no? viviéndo en la CiudadQueLoTieneTodo (menos al hombre de mi vida) me tuve que encerrar en mi penthouse a ... dormir.
Sí, me la pasé durmiendo a todas horas y en todas las posiciones posibles. Con gato, sin gato, con almohada, en el sillón, en la cama, en el cuarto de las visitas, en el estudio... me la pasé jetona y el mundo bien pudo haberse ido al carajo. Yo ya me había bajado de él.
Inclusive, el sábado Kry tuvo a bien rescatarme de mi autoexilio mundial, pero nop..., la neta mi choya andaba en otra parte. Muy lejos de mis hombros, demasiado cerca de la locura.
Gracias a la máxima deidad existente que no me da por beber ni por tener sexo con extraños, pues definitivamente era candidata a terminar o en el Torito o en un basurero.
En vez de ello, mi casa fue el lugar donde el drama tuvo su escenario y el tiempo parecía haberse detenido.
Seguro era el Síndrome de Abstinencia de Matius... o nop.
Finalmente, queridos menos cinco lectores de siempre, hoy pude tener ese encuentro con la terapia y mi mundo parece tener un poco de orden. O al menos me hago la ilusión de que así será, pues... ¿qué somos los seres humanos sin esas licencias poéticas?
No se si me tomará más tiempo que el habitual para hacerme a la idea que ésto es el "aquí y ahora" y no habrá otro momento para trascender. Que la vida no espera por nadie (ni por mi) y que será mejor que le vaya agarrando el gusto de nuevo a la misma.
Y bueno, no hay mal que por bien no venga: quiero hacerles de su conocimiento que van a tener un hermanito... ah caray, no. Esa noticia no es para ustedes.
Jajaja, no, no es cierto.
La Gatería está a punto de tener a su hermanito, un blog donde correrá sangre, saliva y demás sustancias con "S"...
Ahí ustedes búsquenle...púchenle... *Se aleja riéndo descaradamente...




1 comentario:

Anónimo dijo...

NO ESTOY SEGURA QUE SEA DEPRESION COMADRITA..... YO PIENSO QUE HARIA LO MISMO QUE TU, DORMIR Y DESCANSAR TODO LO QUE PUDIERA PUES BUENA FALTA ME HACE. EN MI LISTA DE APLAZABLES LA PRIORIDAD SERIA MI CASA Y TODO AQUELLO QUE NO HE PODIDO HACER, COMO TERMINAR DE DESEMPACAR, LAVAR LOS SILLONES, ORDENAR PAPELES Y ARCHIVO Y PORFIN EMEPEZAR A PINTAR A ARREGLAR EL CUARTO DE MATIUS PERO NO SE SI TENIENDO 5 DIAS LIBRES LO LOGRARA CREO QUE MEJOR DORMIRIA COMO TU.....COMO BIEN LO DICES AQUI NOS TOCO VIVIR Y NO NOS QUEDA AMS QUE SEGUIR ECHANDOLE TODAS LAS GANAS COMO LO HACEMOS HASTA HOY.
TE MANDO UN ABRAZO BIEN APRETADO Y PORFA NO DEJES UNA VEZ MAS QUE LA APATIA Y TRISTEZA TE GANEN. TE QUIERO HARTO O "ARTO" COMO SE ESCRIBE?
DANNY FDEZ.