viernes, 8 de abril de 2011

Salte de mi cabeza, Elena Poniatowska.

La primera noción que tuve de Elena Poniatowska, debo decir, vino de la mano de Thalía.
Era 1986; México se recuperaba de un largo año en el que sus entrañas fueron sacudidas terriblemente y la gente buscaba consuelo en uno de los dos lugares comunes para ello: las telenovelas.
La comedia que en ese entonces era el solaz del populacho se llamaba "Quinceañera", cuya protagonista tenía más de "ñera" que de quince (pues Adela Noriega se veía bastante más mayorcita) y en cuya trama aparecía la no menos simpática, popular y ya mencionada Thalía. ¿Que qué tiene que ver con Elena? Ah pues, sencillo. En uno de sus elocuentes diálogos, el personaje de Thalía es examinada en literatura y con esa picardía juvenil y dando muestras de sus dotes como actriz, comienza a titubear al responder: "La Poni, ji ji, la Poooo...nia...¡tovska!"... ¡Ay Wey!
En aquel momento, el nombre me resultó harto curioso. Pero, niña al fin a mediados de los ochentas, no gozaba de la existencia del Internet como hoy en día, por lo que mi curiosidad por saber a qué carajos se refería Thalía se vió en la necesidad de aguardar ¡ocho años después! para saber bien a bien quién o qué demonios era "La Poniatovska" (sí, con V porque ni idea de la ortografía)
Era 1994. Mítico año en el que por fin podía decirme "novia" de un chico guapo, mayor que yo, de amplia clase y popularidad (con el pequeño inconveniente de que vivía en Querétaro y yo en el muy gustado D.F.) En aquel tiempo cursaba el último año de la secundaria y mis ganas de escribir las remojaba participando en el periódico escolar cuando de repente, un sábado por la mañana llegó una caja de libros que alguien amablemente había donado a la escuela. La miss de español procuró poner su cara más avinagrada dienciéndo que "una colección individual sirve para maldíta la cosa, pues de cada ejemplar debiesen ser más de treinta copias"....ah!, la erudición SEPsosa...
Total que nos dijo que podíamos ratearnos dos libros cada quien, ¡oh, cuánta bondad! y que por ese día era sufieciente, órales, lleguenle a sus casas.
Yo escogí "De noche vienes" de Elena Poniatowska y ¿por qué no? "Veinte historias de Amor" de Caridad Bravo Adams.
Por fin sabía quien era "La Poniatowska" de Thalía, por fin conocí su rostro y sus simpáticos dientes de conejito, por fin encontré mi razón de ser en éste apestoso mundo. Ay sí, llámenme cursi y lo que gusten y manden, yo fui muy feliz de saber que había más allá del sobadísimo "Poema del Mío Cid" y que la lectura no era la tortura que nuestros profesores dibujaban.
Pero ¡oh, cruel destino, soy tu juguete! mi adoración a Elena me duró bien poco. Si bien, acaso unos 4 años, cuando en la Prepa -y después de leer "La noche de Tlatelolco", "Luz y luna, las lunitas", "Fuerte es el silencio", "Querido Diego, te abraza Quiela", "Lilus Kikus" y "Hasta no verte Jesús mío"- topeme con una novela que rompería el encanto poniatowsko: "La Flor de Liz".
No se hasta hoy qué diablos me pasó. Recuerdo que después de leer esa novela tuve una crisis existencial, que tal vez pudo coincidir con la adolescencia, la mayoría de edad, problemas al interior de la casa y mi cuasi deserción escolar. Lo cierto es que después de leer dicha novela, taché a Elena de ser una escritora embustera, encantadora de serpientes y masas y francamente la detesté.
Renegué de haber sido su fan number one y casi casi pedí una quema pública de sus libros.
Una posible explicación tal vez sea el hecho de que empecé su lectura de manera autodidácta, sin saber bien a bien quién era ella, de dónde venía y sus circunstancias personales que la llevaron a ser escritora. Creo que en algún momento había idealizado su vida y en mi muy fecunda imaginación, creí que algún día sería como ella.
Pero no. Ni soy princesa, ni nací en París, ni fui escritora.
Y ciertamente el ranazo que me llevé por aquella "infatuation" fue muy feo. Desde ese momento leí sus libros con mayor precaución y sin tanto fanatismo.
¡Pero me la acaba de volver a aplicar con "La piel del cielo"!
¡Y eso sí que ya no lo puedo soportar!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me alegro!!!!! LittleMonster nisiquiera te deja un viboreo y eso que es tu "Consen" ... jum!
Danny Fdez.

Dana dijo...

Miiiiiiiiiiiira Daniela Fernández, te la paso porque es tu cumple pero quiero aclara que TUUU ni siquiera pelaste el post del himno nacional que nos hacían cantar a huevo en la muy querida ESANS.
Jum y para mayor información, eres consen igual que Edward, los dos ya tienen su post bien dedicado.
P.D. FELIZ CUMPLEAÑOS, NANNY!!!
EMOCIÓN CONTIGO, DE VERAS, EH?
TE QUIERO MUCHO!!

Anónimo dijo...

MIREN DÓNDE ME LAS VENGO A ENCONTRAR!. ERES DANA EL AMOR PLATÓNICO Y SUEÑO DE UN CUATE Q SE LLAMABA ALLEN??? Y DANNY QUE ANDABAS CON "CURA" JIJIJ... YA RECORDÉ LO DE LAS "CATAPULTAS". SALUDINES. ATTE LUPIS (HAGAN MEMORIA Y ACUÉRDENSE DE MI)

Anónimo dijo...

NO SE COTICEN Y ESCRÍBANME EN EL FACE: MONA RESÉNDIZ